Natacha Belova, una artista/diseñadora de marionetas

Natacha Belova, diseñadora de vestuario, escenógrafa y titiritera, profesora del Institut International de la Marionnette Charleville Mézieres, Francia. Nacida en Rusia, en un pueblo cercano a Moscú en 1969. Su infancia, transcurre rodeada de un ambiente teatral, ya que su padre fue actor y director. Natacha muy temprano comenzó a trabajar en el teatro, ya a los 14 años diseñaba el vestuario y los sets de algunas obras. Estando en Rusia a fines de la década de los ochenta, en un momento de experimentación y de transformación personal, decide dejar las tablas e ingresar a la universidad a estudiar historia y filosofía. Al final de sus estudios, se proyecta en ámbitos muy diferentes: profesora, directora de programas de televisión, hasta organizadora de un festival de rock y una conferencia sobre el cine, como los hechos más importantes.

En 1995, decide trasladarse a Bélgica, donde retoma el teatro. Trabajó durante 19 años como diseñadora de vestuario, escenógrafa y titiritera, con una veintena de directores de escenografía, entre los más destacados: Jean -Michel d’ Hoop, Franco Dragone, Carlo Boso, Galin Stoev Didier de Neck, Philippe Blasband, Isabelle Pusher, Christophe Sermet y participando como diseñadora y coreografía de la obra del escritor y cineasta chileno Alejandro Jodorowsky “Trois Vieilles”. Natacha, diseña el vestuario de cerca de cincuenta espectáculos, para la danza, el circo y algunas películas. También una docena de escenografías. Esta trayectoria le ha ganado el reconocimiento dentro de la escena del arte de ese país, y ha sido nominada 3 veces al Premio de la Crítica de Teatro Belga (2008, 2009), finalmente obteniendo este premio en la versión del año 2010, en la categoría de Creación Visual.

En los últimos años, tuvo la oportunidad de llevar su experiencia en el trabajo en conjunto de un proyecto belga–coreano y otro francés–brasileño. Su labor, le ha permitido realizar actuaciones y giras mundiales en diferentes países, dando talleres de diseño de marionetas en Bélgica, Francia, Rusia, Brasil y Chile.

Es profesora en la Academia de Bellas Artes de Tournai y efectúa prácticas en el Instituto Internacional de la Marioneta en Francia, uno de los pocos lugares del mundo donde se enseña la creación y diseño de estas.

Sus creaciones consisten en trabajar con tecnologías alternativas, usándolas en la construcción del vestuario, máscaras y marionetas, logrando una singularidad y un mundo de personajes oníricos que coexisten en el escenario con los actores. El uso del proceso de endurecimiento de tejidos, cola de hueso, materiales termoplásticos, transferencia de fotografía, luz interior, látex, plástico “termo modular”, el diseño del rostro a través de la transferencia de la fotografía, son las técnicas empleadas en sus obras. Así, consigue una novedad de objetos-sujetos únicos y de un fuerte protagonismo. Muchas veces, los resultados de sus cursos, las obras de sus alumnos, son trasladadas a deambular e interactuar en el espacio público.

El uso de la experimentación con la materialidad, ha conducido a la artista-diseñadora a trabajar en torno “a la creación de una marioneta de escala humana, en un cuerpo híbrido junto al de su manipulador”. La anatomía del cuerpo humano se convierte en una fuente inagotable de inspiración y se puede apreciar en sus creaciones.

Sus resultados son formidables, revitalizando una expresión tan antigua como es el uso de las marionetas en el teatro y la calle. En sus proyectos, vuelca su mundo interior poniendo de manifiesto, la deformación, el expresionismo, la angustia y las sombras que rodean la sociedad contemporánea. Las marionetas a escala humana, como se ha dicho, dejan entrever en su retórica, la manipulación del muñeco y viceversa, no solo a través del movimiento, sino también transformándose en ventrílocuos y seres que adquieren vida propia. Además, transitan sus creaciones del humor a las zonas más oscuras del arte demoniaco. Una metáfora persistente, que nos acerca a la escritora Mary Shelley y su novela “Frankestein”, ese experimento de la ciencia hecho a partir de retazos, de pliegues, de fragmentos, de coseduras, de una amalgama de pieles que lo convierten en un monstruo. Un mundo transfigurado de la novela gótica al teatro en las máscaras y los cuerpos inertes de los muñecos que Natacha Belova hace resucitar en sus expresiones una poética de la belleza humana.

Hoy, de nuevo en Chile, viene a dictar un curso de diseño de marionetas y máscaras en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile. Su taller abordará la construcción de los muñecos, el cuerpo y el traje de la marioneta. El diseño y presentación gráfica.