Bultos en el Metro: Corte acoge recurso judicial y Metro suspende indefinidamente polémica medida

La polémica en torno a la medida anunciada por el Metro de Santiago no para. Desde el anuncio de que los bultos grandes que entorpezcan el desplazamiento tanto hacia los andenes como al interior de los vagones serán prohibidos, las polémica se instaló aduciendo que la medida resultaba discriminadora hacia quienes no tienen otra alternativa que usar el tren subterráneo para movilizarse.

La medida establece que se puede ingresar con bultos, bolsos o maletas de hasta 80 centímetros de alto, 50 centímetros de ancho y 60 centímetros de profundidad, lo que en el fondo significa que aquellos bultos que no logren pasar por el torniquete, no serán permitidos.

Pero las molestias y hasta las burlas contra el anuncio del sistema de transporte capitalino logró frenar la polémica normativa, ya que la misma empresa anunció la suspensión definitiva de la normativa, tras conocerse la resolución de la Corte de Apelaciones de Santiago, que acogió una orden de no innovar y que exigía frenar cualquier medida al respecto.

En un comunicado, Metro de Santiago expresó que «en relación a lo resuelto por la Corte de Apelaciones de Santiago, Metro de Santiago informa que suspenderá de manera indefinida la campaña sobre regulación de ingreso de pasajeros con bultos, medida que comenzaría a aplicar a partir del día 6 de octubre próximo«.

El abogado Cristián Norambuena, quien patrocinó la acción judicial en representación de los molestos comerciantes, explicó previo a la resolución de la Corte que «efectivamente la medida es arbitraria, es ilegal y tremendamente discriminatoria. Basado en eso, espero que la Corte nos dé una sorpresa y acoja esta solicitud. Si no lo hace, la tramitación sigue y tendremos que ver los alegatos en la misma Corte», explicó.

Metro aclaró en el mismo comunicado que la suspensión de la normativa será indefinida, «sin perjuicio de lo que la Corte resuelva respecto del recurso».

El abogado explicó sobre el fondo del recurso que «cuando tú cancelas tu pasaje de Metro, estás realizando un contrato de transporte», y agrega que el reglamento relativo a los bultos grande anunciado por la empresa data del año 1975. «Yo lo saqué a la luz publica, porque en definitiva lo que están haciendo ellos es como si fuera algo nuevo, pero esto data del año 75 y ahora con todas estas fallas y con el estándar de calidad pésimo que están dando, sacaron esto como del baúl de los recuerdos«, detalló.

Llaman a manifestarse con masivos bultos grandes el próximo sábado

Además de la medida que busca frenar la polémica normativa por la vía judicial, en redes sociales se ha multiplicado un llamado a manifestarse en contra de la medida, acudiendo de forma masiva el sábado 30 de agosto con bultos que superen las dimensiones permitidas por la normativa.

Alonso López, joven estudiante de Sociología de la Universidad Diego Portales, explicó que su idea surgió conversándolo «no muy seriamente con mis amigos y familiares, que estaban todos en desacuerdo con la medida, y poco a poco a ido tomando vuelo», y agrega que «no pensé que tanta gente estaba de acuerdo con lo que pensaba».

El estudiante de 18 años asegura no debe trasladar constantemente bultos grandes, pero sí se ve obligado a hacerlo cuando viaja a visitar a familiares en el sur del país.

López asegura que su convocatoria surgió de manera espontánea. «Se me ocurrió y la idea fue madurando de a poco. Algunos amigos me dicen que le meta una batucada para hacerlo más choro pero está muy improvisado, tampoco es algo demasiado pensado«.

«El servicio de Metro definitivamente podría ser peor pero no por eso hay que conformarse. Dentro de todo, Metro es una empresa privada que está haciéndose lucas con plata que le pasamos todos los chilenos casi por obligación, porque no tenemos otra manera de viajar», explica el estudiante sobre su visión de la empresa de transporte.

Finalmente, López dice que hay otras medida «de sentido común» para solucionar el problema de los bultos, como «habilitar vagones para quienes viajen con maleta». «La idea es plantear una conversación con la empresa, no es irse en picada con Metro ni que ellos se vayan en picada contra nosotros», finalizó.