Para las 10 am de este lunes estaba programada la comparecencia de Sebastián Dávalos ante el fiscal regional de O’Higgins, Luis Toledo, quien lleva adelante las indagatorias en torno a posibles irregularidades cometidas en la compra de terrenos en Machalí por parte de Caval, empresa de la cual su esposa, Natalia Compagnon, es propietaria del 50%.
El ex director sociocultural de La Moneda llegó cinco minutos antes de la hora pactada, en medio de fuertes medidas de seguridad y resguardo policial que buscan evitar posibles incidentes a la salida de la declaración del imputado, como los ocurridos el miércoles pasado cuando su esposa declaró por la misma causa.
Dávalos debía declarar junto a Compagnon ese día, bajo la argumentación de que su abogado tenía problemas de agenda para asistir a la comparecencia.
Durante este fin de semana se conocieron nuevos antecedentes aportados tras las declaraciones de Compagnon, que se extendieron durante más de 9 horas. Según su testimonio, el 50% de las ganancias en la venta de terrenos estaban destinadas a dos operadores políticos de la UDI, tras un acuerdo alcanzado con su socio en Caval, Mauricio Valero.