El músico, que postula a candidato por Valparaíso, se mostró tranquilo por los resultados que se sabrán pasadas las 18 horas. Consultado por las razones detrás del desinterés de la ciudadanía, el músico no le echó la culpa ni a la Copa América ni a ningún otro evento, sino que al descrédito que tienen los grandes bloques políticos del país.
Más conocido por su carrera musical y su vínculo con el mundo de la TV, Leopoldo Méndez (Independiente pro PPD) es uno de las cartas que más llama la atención en las primarias muncipales que se llevan a cabo hoy a lo largo de todo el país. El rapero se enfrenta en las urnas por el cupo como candidato de la Nueva Mayoría en Valparaíso contra Omar García (DC), ex gobernador de la ciudad, y contra Roberto Aravena (PS), dirigente sindical.
Otrora conocido como DJ Méndez, su inscripción a las primarias no estuvo exenta de polémicas: el Servel rechazó la postulación del cantante por no tener la escolaridad mínima para postular al cargo. Tras apelar, se le permitió competir en igualdad de condiciones por el sillón de la alcaldía. En múltiples entrevistas, el cantante ha señalado su fuerte vínculo con el puerto y su apuesta independiente e uno de los grandes atractivos de esta elección.
Así fue como Méndez, oriundo de Cerro Barón, llegó cerca de las 12:30 horas de hoy a emitir su sufragio para las elecciones de hoy. «Yo estoy haciendo mi parte, quiero un cambio y por eso estoy acá», señaló ante las preguntas de la prensa que aguardaba expectante su participación, apuntó. Además, dijo estar tranquilo por los resultados que se sabrán pasadas las 18 horas pero a la vez preocupado por la baja concurrencia a votar por parte de la ciudadanía, situación que en su centro de sufragio se traduce en que en una mesa con más de mil personas habilitadas para votar, sólo diez habían concurrido a emitir su sufragio.
«Es grave, es preocupante porque después no nos podemos quejar», aseguró al respecto. Consultado por las razones detrás del desinterés de la ciudadanía, el músico no le echó la culpa ni a la Copa América ni a ningún otro evento, sino que al descrédito que tienen los grandes bloques políticos del país. «No tiene nada que ver el Día del Padre, es desencanto», finalizó.
