Frente Amplio responde a editorial de El Mercurio que «caricaturizó» su programa de gobierno

El Frente Amplio respondió a la editorial de El Mercurio que analizó su programa de gobierno y acusaron al matutino de «caricaturizar» sus propuestas.

A través de una carta al diario, la abogada Maite Orsini y el presidente de Revolución Democrática, Rodrigo Echecopar, respondieron a los puntos planteados en la editorial.

«En el editorial se indica, con alarma, que nuestro propósito de impulsar un cambio constitucional «no es políticamente neutro». ¿Existe alguna Carta Fundamental que lo sea? No, y en buena hora, porque las Constituciones deben reflejar los grandes consensos nacionales – democráticamente definidos – sobre un determinado orden jurídico y político, en oposición a otros», parten por señalar los militantes del Frente Amplio.

Tras esto, recuerdan que no existe ninguna neutralidad en la constitución que existe en Chile. «Nos legó un Estado subsidiario, que se tradujo en la mercantilización de nuestras relaciones sociales, y una democracia descolorida y restrictiva, abriendo la puerta a la cooptación de la clase política por el dinero», argumentan en referencia a la constitución impuesta en dictadura.

Otro de los puntos que tocaron fue el supuesto riesgo que corren los «derechos de propiedad» de los cotizantes ante un eventual término de las AFP. «Solo los dueños de las AFP dejarán de acceder a utilidades virtualmente garantizadas, para avanzar hacia una institucionalidad pública que maximice el bienestar social e introduzca solidaridad y justicia en nuestras pensiones», enfatizan Orsini y Echecopar.

Para cerrar la misiva, la abogada y el presidente de RD argumentan que el programa fue construido de manera responsable. «Lejos de ser una utopía, el programa del frente amplio encarna conceptos que en muchos países son sentido común. Fue elaborado responsablemente, con respaldo jurídico y financiero, por personas de diversas corrientes de opinión (liberales, socialdemócratas, y también socialistas) que comparten el diagnóstico sobre «el problema con el poder» y proponen redistribuirlo con un modelo de desarrollo acorde a las necesidades y desafíos del Chile de hoy», aseveran.