Checho Hirane, el humorista de la derecha y los militares

La biografía de Sergio Hirane Sarkis, detallada en su web, describe su debut artístico a los 7 años de edad. Desde pequeño, Sergio fue apodado “Checho” por sus amigos y el seudónimo, como suele pasar en el país con los rostros abc1, fue replicado por los medios hasta hoy, estilo Kike Morandé.

Su web ChechoHirane.cl también sostiene que la primera crítica especializada hacia sus actuaciones la hizo el periodista Ítalo Passalacqua en La Segunda, año 1983. Tiempos de oro para Sergio. Justo un año después, “debido al éxito alcanzado”, Hirane es invitado a participar del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, donde protagoniza un ridículo episodio.

La memoria es frágil, pero vale la pena recordar: ante la desaprobación del “Monstruo” debido a la rutina indiscutiblemente fome, el humorista olvidó lo que seguía y se quedó mudo, mientras los organizadores comenzaban a montar un número artístico para terminar con la accidentada performance. Ante la desesperación, Checho Hirane terminó saltando en una cama elástica para hacer reír al público.

“Después de su actuación en el Festival de Viña del Mar, comienza una carrera meteórica actuando en más de 700 programas estelares de la televisión chilena”, sentencia su biografía, haciendo caso omiso del papelón vivido en la Quinta Vergara. Entonces, Canal 13, que durante los 90’ se dedicó a regalonear a los rostros históricamente asociados a la dictadura, lo convierte en animador de “Video Loco”, junto a Álvaro Salas, Eliseo Salazar y Carolina Arregui.

En paralelo, el “humorista” se asoció con su amigo cantante, Miguelo, y formaron el pub “Romeo”, en cuyo espacio fueron vistos diversos rostros de la derecha chilena. Sobre todo, militares, como el oficial de Ejército Armando Fernández Larios, su amigo, y uno de dos agentes de la DINA acusado del asesinato de Carlos Prats y su esposa Sofía Cuthbert en Buenos Aires.

“Fuimos buenos amigos. Iba mucho al Romeo y salíamos a andar en moto, que era una pasión que compartíamos. Todo su lío judicial siempre lo ignoré. Yo creo que me lo ocultó para protegerme”, ha contado Checho.

Además de hacer reír a los militares, Hirane conseguía pitutos en shows dedicados a los empresarios. El pub Romeo, en tanto, continuó consagrándose en los martes femeninos, gracias a los bailes de Miguelo y la presencia del humorista favorito de la Junta Militar: Ronco Retes, el imitador oficial del dictador. Miguel Piñera, hermano del ex presidente, era otra de las visitas ilustres.

Las fiestas de la dictadura estaban musicalizadas por Pancho Puelma, Peter Rock y Álvaro Scaramelli. El Negro Piñera, en su estilo abajista, ya insistía desde aquellos tiempos en tocar canciones de Violeta Parra, Víctor Jara y Los Jaivas.

La entretención para los militares se pedía a domicilio y representaba, para el círculo de artistas locales, una buena oportunidad de abrir puertas y ganar dinero. Pedro Messone, Coco Legrand, los hermanos Zabaleta, Miriam Hernández, Viviana Nunes y Pollo Fuentes (premiado por Piñera junto a los Huasos Quincheros), entre otras figuras, recibieron el llamado de los uniformados.

Por estos días, sin embargo, a Checho Hirane no le acomoda hablar de la diversión que organizaba durante la dictadura. “Yo llevo años en esta cuestión y sé que vai por ahí para tratar de decirme si iba gente de determinado sector político. Nunca tuvo nada que ver con eso mi local. ¿O no ibas para allá? Hazme tu pregunta”, respondió a un periodista de The Clinic, al ser consultado sobre el Pub Romeo.

Su verdadero sentido del humor: las ideas de Checho

“En sus empresas él ha salido airoso y me encantaría que en esta empresa que se llama Chile le fuera bien”, declaró algún día sobre Sebastián Piñera, sumándole otros ingeniosos puntos de vista, tales como “creo que un gobierno de Sebastián Piñera va a ser el gobierno de derecha más socialista que existe” y “voté por el Sí, porque no sabía lo de los derechos humanos”.

Él, como todo derechista encubierto, defiende “la obra económica de Pinochet” y apunta al gobierno de Salvador Allende como el responsable de destruir “la economía y la convivencia”.

“Yo siempre he defendido el modelo económico que se instauró en Chile en el gobierno militar y que continuó con la Concertación. Yo soy ingeniero de la Católica, soy de los que inventaron el sistema. Pero eso no me hace una persona de derecha”, aseguró.

Desde su tribuna en el programa “Conectados en Agricultura”, Checho Hirane simula el rol de un periodista que habla y opina de todo con férrea convicción. Muchas veces, demostrando su ignorancia, como ocurrió cuando Marcel Claude lo ridiculizó en una entrevista radial, al discutir sobre capitalismo.

“¿No crees en el emprendimiento, por ejemplo?”, se defendía inocentemente Hirane, ante las críticas al sistema capitalista. “El lucro es el motor que mueve al ser humano”, aseguró.

Dicen que a nadie le falta dios. A través de Twitter, sus seguidores le envían mensajes de aliento y él les hace RT: “Hola Checho, los que vivimos esos tiempos hemos sido cobardes y culpables en no hablar de todo los que vivimos en el 70 al 73”, se lee. O “estoy contigo!! :-), eres nuestro «Jorge Lanata» chileno te necesitamos más de lo que crees. Saludos”.

¿Qué ha expresado Checho Hirane sobre el matrimonio homosexual?: “¿Por qué los homosexuales quieren tener un matrimonio? Para provocar y no creo que los problemas se solucionen provocando”. ¿Qué dice sobre el conductor radial sobre el rol del Estado?: “No creo en el papá Estado que te dice dónde tienes que estudiar o cuánto vas a ganar. Al final unos pocos deciden tu vida. Yo creo en la libertad, en el emprendimiento, en las personas. Por eso es que este sector me representa más que la Concertación, pero soy independiente”. ¿Independiente?

“Lo que nosotros tenemos que atacar es la pobreza, no la desigualdad. La desigualdad es inherente al ser humano”, es otra de sus frases para el bronce. El hijo de Manuel Contreras, en tanto, lo funó hace algún tiempo al contar que Hirane visitó al torturador Miguel Krassnoff: “Fue mi teniente y me pidió conversar conmigo, me pareció un acto humano ir a visitarlo y hay muchas cosas que él me dice que tienen mucho sentido, pero yo no soy juez para condenar a nadie”, explicó.

Hirane ingresó a los 15 años a la Escuela Militar. Eso explica su reciente aparición en la parada militar –que dio origen a miles de memes y bromas con su look castrense- y su ferviente admiración –observada en vida- por los uniformados. Aunque hoy, el “humorista” pretenda hacer como que nada de eso hubiera sucedido.

Por la boca muere el pez

En abril de 2007, Checho Hirane fue detenido debido a una causa por fraude al Servicio de Impuestos Internos (SII), junto al comentarista deportivo Mario Mauriziano y el otrora respetado Profesor Rosa. Su libertad fue obtenida después del pago de una fianza de 3 millones de pesos.

Años después, el conductor radial, conocido por sus cátedras morales contra los corruptos, fue condenado a tres años y un día de libertad vigilada por el delito de fraude tributario. En la investigación, también fueron acusados, además de Mauriziano, Iván Arenas, más conocido como “El profesor Rossa”.

Hirane era representante legal de Sociedad Checho Producciones Ltda y deberá pagar una multa equivalente al 100 por ciento de lo defraudado, además de las costas del juicio. De no hacerlo, el SII puede iniciar una demanda ante los tribunales civiles y enviarlo a la cárcel.

Mientras, el Checho continúa al mando de sus programas y de su Twitter como si nada hubiera pasado. Opinólogo innato, ha retuiteado entrevistas de Patricio Aylwin explicando “cómo fue la destrucción del país” y ha llamado al gobierno a dejar su ideología “de lado”, pero de su delito financiero, ninguna palabra.

Hirane también ha piropeado las actuaciones públicas de Andrés Velasco. Es una figura más de la errática farándula militar, repleta de miembros que hoy reniegan de su pasado y se acomodan a los nuevos tiempos por vergüenza, miedo a las críticas y oportunismo. En la tele, en las radios, en las letras o donde sea. Todos comparten una característica común: la memoria atrofiada. Si no, pregúntele a Checho Hirane, el nuevo independiente.