Durante el próximo 5 de septiembre, se llevará a cabo una nueva manifestación nacional en contra del rodeo, convocada por la organización Animal Libre. La protesta, que se replicará en diversas regiones de Chile, viene a poner en evidencia el creciente interés de los chilenos y chilenas sobre temas respectivos al maltrato animal y incipiente rechazo hacia la práctica del rodeo, hasta hoy considerado un «deporte nacional».
En entrevista con eldesconcierto.cl, la coordinadora nacional de Animal Libre, Karen Flores, comentó los detalles de la próxima convocatoria y las razones que los impulsan a manifestarse en contra del rodeo, de cara a una nueva celebración de las Fiestas Patrias.
La marcha de este sábado tendrá su correlato en diversas regiones del país, lo que evidencia la apuesta por una protesta más masiva. ¿Creen que el rechazo al rodeo ha crecido en los últimos años?
Creo que cada vez crece más el interés de la gente por diferentes temas que estén relacionados al resto de los animales. Por ejemplo, en nuestro país, la explosión de locales para veganos y vegetarianos da cuenta de que la gente quiere ver a los animales de otra manera y de cómo el mercado responde a eso. Por otra parte, la convocatoria a la marcha también crece cada año, cada vez hay más gente que está interesada y también se debe a que medios como los de ustedes, por ejemplo, están interesados en mostrar estos temas.
Nosotros sabemos que la gente del rodeo mueve mucho dinero y que hay poderes fácticos que también se desarrollan desde ahí, lo que evidencia lo complejo que es hablar estos temas públicamente. Nos han invitado a debates donde ellos no permiten que se grabe o simplemente no asisten, no les interesa debatir sobre el tema, pero nosotros seguimos en la calle informando y esta semana habrá un stand informativo en Paseo Ahumada contando detalles sobre la marcha y las actividades del sábado en varias regiones de Chile.
Todavía hay gente que no entiende por qué el rodeo concita tanto rechazo. ¿Cuáles son sus argumentos en contra de esta práctica?
Nuestro principal argumento es que los animales no son nuestra propiedad, algo que defendemos desde el mundo del veganismo como organización. El resto de los animales no vino a este mundo para ser utilizado en algo que no se puede llamar deporte, donde hay un animal que está no está en igualdad de condiciones ni que está ahí participando porque quiere, aunque en la antigua ley de maltrato animal el rodeo no era considerado un tipo de abuso.
Con el equipo legal de Animal Libre hicimos una investigación durante meses para indagar los dineros que recibe las agrupaciones de rodeo en Chile. En España hay municipios donde se le ha quitado financiamiento a las corridas de toro y ha sido el puntapié para comenzar a generar un debate que permite que la gente comience a rechazar estas prácticas también por eso. Es decir, hay dineros que se podrían ocupar en un consultorio, en una escuela o en mejorar una calle y se le está entregando a la gente del rodeo para fomentar este deporte. Por ejemplo, en cinco años, las municipalidades entregaron cerca de 4 mil millones de pesos a su desarrollo.
También nos interesa contarle a la gente que con plata de todos los chilenos se está financiando una actividad que es de pocos. En esto se consideraba mejoramiento de medialunas, eventos especiales y otras cosas que sólo benefician a 20 personas. El otro día Roxana Miranda, la ex candidata presidencial, me invitó a una reunión de ANDHA Chile donde les expuse el tema de los dineros y estaban impactados. Es una realidad que ellos no conocen y a la que tampoco tienen acceso. La idea es precisamente llegar a otros actores sociales y contarles de esta investigación y de los maltratos que reciben los animales en el rodeo, en la cadena de utilización del animal. Participar de este tipo de espectáculos te involucra en una cadena de muerte y explotación.
¿Qué les parecen las críticas de quienes defienden el rodeo desde la perspectiva de las tradicionales y la chilenidad?
Esta tradición, entre comillas, la mantienen las familias con más dinero, esa es la verdad. Y la gente que trabaja para ellos lo defiende porque es su fuente de trabajo, pero los mayores beneficiados son las elites que mantienen esta actividad de familia en familia. Es importante decir que no porque algo sea tradición es correcto, recordemos que han habido una serie de tradiciones que se han erradicado porque son sanguinarias y vejatorias de los propios humanos.
Nosotros hablamos de jerarquía moral. A los humanos nos han enseñado a establecer un tipo de jerarquía moral, donde los animales están el último piso y nosotros en el primero. Nos han educado de esa manera, a mí me educaron así, comiendo carne y en el colegio me enseñaron a respetar la cadena alimenticia, sin entregarme toda la información para que yo pudiera decidir, una educación especista. Eso no quiere decir que no podamos cambiar de opinión y abrir nuestras mentes desde el conocimiento. Está comprobado científicamente que los animales sienten, que tienen un sistema nervioso central que les permite sentir dolor, a diferencia de las plantas. Un animal en el rodeo no puede escapar porque está ahí obligado, hay imágenes que muestran que, ni siquiera con la aplicación de electroshock, los animales pueden pararse para seguir participando.
Hay gente que dice «bueno, están en contra del rodeo, pero igual comen carne» y no, nosotros no consumimos carne, no nos vestimos con ellos ni tampoco asistimos a otro tipo de espectáculos donde son utilizados, como los zoológicos o los circos con animales. Nuestra idea es informar lo que más podemos porque hay mucha ignorancia respecto a estos temas y en la calle tenemos la posibilidad de educar a muchas personas al respecto. Para cambiar un paradigma, se necesita de educación.
En San Bernardo hubo un grupo de concejales que se comprometió a no financiar más este tipo de actividades. ¿Cómo ves el interés de los políticos en general respecto a este tema?
Hubo un grupo de activistas de Animal Libre que fueron a los concejos de la Municipalidad de San Bernardo a presionar, porque es importante tener la capacidad de pedirle a la gente que los elegimos que nos representen. Un ejemplo de esto es lo que pasó con Gabriel Boric, él había auspiciado el proyecto de Jineteadas Patagónicas, pero la presión fue tanta que él se retractó. Quizás personalmente le parecía muy atractivo, pero él se dio cuenta que estaba representando a muchas personas y que no podía ser parte de esto. En este sentido, es importante presionarlos.
Hemos conocido de todo, a políticos que no comen carne o que no están de acuerdo con los zoológicos y ya tienen un discurso al respecto. Quizás no tanto como nosotros quisiéramos, sería ideal que un vegano pudiera llegar al poder y hablar por eso. El tema del menú vegano, por ejemplo, que fue propuesto por Camila Vallejo y Vlado Mirosevic, también es una muestra de la preocupación que emerge sobre esto.
¿Es posible advertir un impulso del movimiento animalista en general en Chile?
Yo siento que sí. Está la intención de querer debatir de manera seria, no atacando ni descalificando, y por otro lado el mercado responde a la gente que está interesada. Hay yogurt o alimentos de soja en supermercados hoy, cosa que antes era imposible, entonces ha sido todo un fenómeno que desde hace un par de años ha sido muy beneficioso para el resto de los animales. Por lo demás, este es un tema donde la gente celebra que los políticos tengan definiciones al respecto y las redes sociales han ayudado a sumar nuevos activistas y convencidos.
