Gutenberg Martínez: el «líder fáctico de la DC» que marca el debate desde las sombras

Desde el 2006 no ejerce ningún cargo público y sólo se mantiene como consejero nacional de su partido, la DC, pero todavía se le describe como uno de los «líderes fácticos» de la falange. Los análisis apuntan a que Gutenberg Martínez, figura de larga influencia entre los sectores más conservadores de la Concertación y la Nueva Mayoría, sigue activo desde la penumbra, marcando presencia en cada uno de los pasos del gobierno de Bachelet. 

Junto a su esposa, la ex senadora Soledad Alvear, Martínez ha construido una especie de sociedad política que se mueve en alianza a la hora de marcar tendencia en diversos temas cuya discusión está en desarrollo: desde educación hasta Asamblea Constituyente, pasando por discusiones como el aborto y marcando la dirección de la propia coalición oficialista.

A LA DEFENSA DEL LUCRO

Desde los inicios de la propuesta de reforma educacional del Ejecutivo, Gutenberg Martínez, quien se desempeña como rector de la Universidad Miguel de Cervantes, se ha mostrado crítico de la idea de terminar con toda forma de lucro al interior de las universidades y establecimientos educacionales.

En septiembre de 2014, Gutenberg participó en la confección de un documento con 35 páginas, donde se reinvidica el «carácter mixto de la educación» y se recalca que la reforma debe resguardar el derecho de la familia a elegir el proyecto educativo para sus hijos.

Dos meses más tarde, Gutenberg Martínez se reunió con el arzobispo de Santiago, el cardenal Ricardo Ezzati, para abordar la reforma educacional desde la perspectiva de la Conferencia Episcopal de Chile. En específico, el motivo de las conversaciones se se centró en la crítica a la prohibición de arriendos en colegios particulares subvencionados, lo que obstaculiza los intereses de la Iglesia Católica y de la propia DC en una serie de establecimientos.

Martínez es un firme defensor de la idea de que los sostenedores puedan arrendar los edificios donde funcionan los colegios. Sin embargo, en el Parlamento, esta posibilidad se rechazó porque se estimó que el lucro en la educación persistiría gracias a este tipo de mecanismos.

«El Gute» -como lo llaman en el oficialismo- reaccionó con molestia: «Me parece que es una limitación a la posibilidad de que profesores puedan generar un proyecto educativo. Ahí lo que se está señalando es que sólo podrían fundar colegios en Chile el Estado o quienes tengan mucho capital. Creo que eso es una grave limitación a un principio básico que es la libertad de enseñanza”.

Como rector de la U. Miguel de Cervantes, Martínez confesó ganar 2 millones 600 mil pesos, asegurando que «ningún rector en Chile gana eso». Sin embargo, una investigación realizada por Ciper confirmó que los sostenedores vinculados a la DC recibieron, sólo en 2013, más de 41 mil millones de pesos en subvenciones. De estos, se desprenden dos núcleos de la DC: el primero es dirigido por Gutenberg Martínez, en la UMC, junto a cinco sostenedores. El segundo, el grupo de Inversiones Norte Sur, maneja 19 colegios subvencionados y reúne a militantes y simpatizantes de la falange.

En conjunto, ambos grupos representan un total de 67 colegios subvencionados que educan a un total de 65 mil alumnos, una gestión por la cual el Estado les terminó entregando un equivalente a US$ 70 millones. Además, estas cifras no incluyen los dineros que algunos sostenedores reciben a través de sus consultoras de Asistencia Técnica Educativa (ATE).

JUNTO A ALVEAR: LA TENAZ RESISTENCIA AL ABORTO 

En alianza con la ex senadora Soledad Alvear, Gutenberg Martínez ha realizado un par de movimientos dedicados a obstaculizar el proyecto de despenalización del aborto que fue propuesto por el Ejecutivo. En julio pasado, participó de la creación de una carta firmada por 15 consejeros nacionales de la DC en rechazo a la iniciativa, que más tarde fue entregada al secretario general del partido, Gonzalo Duarte.

«Venimos a solicitar que en el próximo Consejo Nacional pudiésemos contar con la presencia del camarada Dr. Gonzalo García, abogado y vicepresidente del Tribunal Supremo, y del camarada Dr. Sergio Valenzuela, médico ginecólogo, jefe del Departamento de Ginecología de la Universidad de Chile, a objeto de que nos entreguen su visión sobre el proyecto de ley en cuestión», rezaba la misiva, liderada por el actual intendente de La Araucanía Andrés Jouannet, muy cercano al matrimonio Martínez Alvear.

El mismo Gutenberg recordó en una de las sesiones de la DC la postura del V Congreso Ideológico del partido, que fue realizado justo cuando Soledad Alvear presidía a la colectividad. En él, se sostiene que la DC rechazará todo tipo de interrupción del embarazo.

Aglutinando fuerzas, Martínez logró que 12 consejeros apoyaran su iniciativa y articuló la ofensiva de los firmes opositores al aborto en caso de violación, provocando que la primera discusión sobre el proyecto en el Parlamento fuera postergada (previa comunicación con el ministro del Interior, Jorge Burgos) y despertando las sospechas de las organizaciones feministas sobre el poder de su lobby en el oficialismo.

«Si uno cree en los derechos humanos y entiende que el derecho a la vida es un derecho humano elemental, una discusión sobre el derecho a la vida no es un mero trámite, es una discusión profunda que tiene que tomarse todo el tiempo que sea necesario«, señaló, desconociendo la espera de más de 25 años de las mujeres chilenas por la despenalización del aborto y la apertura del mismo debate.

VIUDO DE LA CONCERTACIÓN: MARTÍNEZ DICE «QUE VUELVA EL ARCOIRIS»

Desde la inclusión del Partido Comunista en la Nueva Mayoría (que definió como un “acuerdo electoral con fecha de vencimiento”), Gutenberg Martínez ha realizado diversas críticas a la coalición y a su proyecto de gobierno, sin mayor cuidado del delicado momento político que enfrenta Bachelet.

“Tengo la percepción que se produjo una cosa bien delicada para la Nueva Mayoría; perdió la mayoría. Cuando la Presidenta tiene un cuarto de apoyo, cuando las encuestas más reputadas dicen que la Nueva Mayoría tiene un 18 por ciento de apoyo, quiere decir que estamos en problemas”, señaló el ex diputado.

Pero no fue lo único, el militante falangista también cuestionó las promesas del gobierno, asegurando que «cuando se planteó en el programa de gobierno que haríamos 20 hospitales, 20 proyectos, todos sabíamos que no se iba a poder, por recursos y diferentes factores».

Desde el oficialismo, Martínez ha recibido las críticas de algunos de sus pares, que incluso lo han llamado «un viudo de la Concertación». Una definición nada fantástica si se considera que él mismo ha recalcado la necesidad de «reconstruir el arcoris, más que una línea monocolor. El arcoiris tenía el arte de agregar posiciones y buscar consensos respecto a las políticas más gruesas”, aseguró en su momento.

«Lo que busca Gutenberg Martínez es claramente la vuelta de la Concertación«, señaló el presidente del PPD, Jaime Quintana.

La molestia con la dirección que toma el gobierno de la Nueva Mayoría lo ha llevado a mover sus cartas en el asunto, fortaleciendo a la DC al interior del oficialismo. Así, vivió como una propia victoria el nombramiento de Andrés Jouannet en la Intendencia de La Araucanía, ya que la relación entre ambos es muy cercana. Hasta antes de la salida de Huenchumilla, además, Jouannet se desempeñaba como asesor de Jorge Burgos.

Durante la última semana, «El Gute» también fue uno de las figuras políticas que salió a defender al senador Jorge Pizarro y a Matías Walker de las críticas por sus respectivos viajes al extranjero tras el terremoto y hasta tuvo tiempo para defender al operador político de la Nueva Mayoría, Giorgio Martelli, hoy procesado por emisión de boletas falsas a SQM.

«Las referencias que tengo son de una persona seria, que intentó ser un aporte a la calidad de la política. He leído las crónicas que hablan de que la Fiscalía está sorprendida por el orden que mantenía respecto a todo lo que se estaba haciendo. Desde ese punto de vista no hay oscuridad, sino hasta transparencia. (…) No sé si será políticamente correcto decirlo, pero estoy aburrido de los enjuiciamientos populares. No he sido partidario de eso y no lo voy a ser nunca», agregó.

Además, Martínez posee un peculiar análisis sobre el trabajo realizado por la Concertación tras el fin de la dictadura: «Yo estoy entre los que decimos que lo que hicimos en los gobiernos de la Concertación fue cambiar el sistema neoliberal que vivía el país a partir del gobierno militar y de derecha de Pinochet. Nosotros implementamos todo un cambio de aquello por algo que va más en la línea del crecimiento con equidad, que está en el marco de lo que es una economía social y ecológica de mercado».

RESISTENCIA A LA AC Y EL DESPRECIO A LOS MOVIMIENTOS SOCIALES

Fiel a su visión de la política, Martínez se ha mostrado incómodo con el protagonismo de la ciudadanía y los movimientos sociales en el debate político que Chile vive desde 2011. En la misma línea, ha rechazado la importancia del movimiento estudiantil y la lucha librada en las calles del país por una educación gratuita y de calidad.

«Los movimientos estudiantiles tienen hoy vanguardias en su dirección que no siempre poseen un origen democrático en su generación”, señaló en su momento. Además, ha asegurado que se cae en un error de seguimiento de lo que se entiende que es la opinión pública o la voz de la calle.

Al respecto, ha enfatizado que «falta una mayor tarea de conducción. Si uno no define lo que es el lucro mal habido, si a final de cuentas prohíbe toda legítima retribución por el trabajo o el emprendimiento, lo que está diciendo es que la sociedad debiera moverse a través del Estado o la filantropía. Y sería desconocer algo que es parte de la actividad humana. No cabe ninguna duda que la creación de riqueza es una necesidad para que las sociedades avancen». Esto, en alusión directa a las líneas de la reforma educacional.

La idea de construir una nueva Constitución para el país con la participación de toda la ciudadanía tampoco convence al líder falangista. Así lo recalcó Manuel Antonio Garretón en una entrevista con Vía X: “Yo creo que el sector que encabeza Gutenberg Martínez es el que básicamente no quiere que Chile complete su proceso de democratización, que se siente bien en esta fórmula, que se sentía bien en la Concertación y que nunca le gustó la Nueva Mayoría”.

Dentro de la DC, el debate al respecto es intenso y tiene su eco en La Moneda, a través de lo expresado en numerosas ocasiones por el ministro Jorge Burgos, también cercano a «El Gute». Martínez, en tanto, participa directamente de la propuesta de la DC para el cambio constitucional, apostando porque el contenido de una nueva Constitución no parta desde cero, sino que mantenga elementos de continuidad.

Los pasos y movimientos de Gutenberg Martínez al interior de la DC no han pasado desapercibidos hasta ahora y ya son varios los miembros que acusan a su sector de obstaculizar las reformas impulsadas por Bachelet. Las fisuras se hacen sentir: «Efectivamente hay algunos que han exacerbado las críticas, pero son personas que más bien están fuera del Parlamento y que necesitan de este tipo de posiciones para seguir generando notoriedad pública, como el propio Gutenberg Martínez», declaró sin rodeos el diputado Fuad Chahuín. Lo cierto, es que el propio Martínez ha logrado hasta ahora mucho más que mantenerse vigente en la opinión pública.