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[Archivo] Paraísos fiscales suman stock de inversión por 21.000 millones de dólares en Chile

Por: Francisca Quiroga | Publicado: 10.04.2016
La economía chilena recibió inversiones por 21.600 millones de dólares desde los paraísos fiscales que operan en todo el mundo, según informes estadísticos oficiales del Banco Central, revisados por eldesconcierto.cl

La economía chilena recibió inversiones por 21.600 millones de dólares desde los paraísos fiscales que operan en todo el mundo, según informes estadísticos oficiales del Banco Central, revisados por eldesconcierto.cl

Este stock de inversión directa tiene como principal origen Bermudas e Islas Caimán, las que en conjunto suman recursos por 15.000 millones de dólares, según las cifras del instituto emisor a 2013. Bahamas y Luxemburgo aportaron otros 4.700 millones de dólares a esa fecha, cifra que equivale a todo el costo de la Reforma Educacional.

Las estadísticas, que serán actualizadas hasta 2014 durante septiembre según fuentes de ese organismo, constatan que uno de cada diez dólares que ingresan como inversión al país lo hacen desde paraísos fiscales, provenientes de empresas extranjeras o de empresas chilenas con filiales en esos territorios.

INVERSIONES CHILENAS EN EL EXTRANJERO

En contraste, el stock de inversión chilena directa en paraísos fiscales ascendió a unos 4.300 millones de dólares sólo hasta 2013, con Islas Caimán e Islas Vírgenes Británicas como principales destino de los flujos chilenos a estos destinos financieros, según los registros oficiales del Banco Central.

Ambos territorios acapararon un stock de inversión por unos 3.300 millones de dólares, equivalente al costo de construir y habilitar completamente los 30 hospitales nuevos que requiere el sistema público, con unas 6.000 camas operativas.

Algunas de las empresas que tuvieron o tienen sociedades de inversión en los paraísos fiscales, según sus propias memorias, son Concha y Toro, Falabella, Soquimich, CAP y LAN, esta última compañía que fue propiedad del presidente Sebastián Piñera hasta 2010. Un informe del Servicio de Impuestos Internos calculó que más de 300 empresas chilenas operan u operaron en esos destinos.

Por cierto, también aparecen en este listado, nuevamente y según sus propias memorias, la filial chilena de Coca Cola y empresas como la productora de bebidas CCU o la papelera CMPC, ambas firmas emblemáticas de los grupos Luksic y Matte, algunas de las mayores fortunas de Chile, respectivamente.

Las operaciones, que abarcan países o territorios como Aruba, Barbados, Bermudas, Chipre, Islas Vírgenes, Islas Caimán, Luxemburgo, Lichenstein, Liberia e Islas Mauricio, son totalmente legales y abren un debate sobre las disposiciones tributarias del país.

LOS IMPUESTOS 

Pero el tema de los paraísos fiscales o las operaciones internacionales de las grandes empresas no termina en el problema de las inversiones, de la eventual elusión de impuestos o del hecho de que Chile podría estar recibiendo miles de millones de dólares en inversiones sin origen conocido.

Otra dimensión, y que va más allá de los paraísos fiscales, es la masiva rebaja de impuestos que hicieron las empresas chilenas de sus impuestos en el país, aduciendo el pago de tributos en el extranjero, como gasto.

Un informe por Ley de Transparencia emitido este año por el Servicio de Impuestos Internos detalló que las empresas que operan en Chile obtuvieron un crédito por impuestos extranjeros ascendiente a unos 300 millones de dólares sólo en 2013, el último año con estadísticas disponibles asociadas al Formulario 22.

Es decir, que las grandes empresas chilenas rebajaron de su pago de impuestos en el país los tributos cancelados en el extranjero. En otras palabras, que el fisco y los ciudadanos más pobres dejaron de tener recursos para políticas sociales porque las grandes compañías chilenas fueron favorecidas con este beneficio tributario.

Este dinero, en comparación, es similar al costo de toda la reforma previsional aprobada por la presidenta Michelle Bachelet en su primer mandato (2006-2010).

PANORAMA LATINOAMERICANO

En el mundo existen 73 paraísos fiscales que son países o territorios que otorgan beneficios tributarios excepcionales a ciudadanos y empresas no residentes en su suelo.

De estos “tax haven” -su denominación en inglés- algunos de los más importantes están en América latina y el Caribe, tales como Antigua y Barbuda, Aruba, Bahamas, Bélice, Bermudas, Dominica, Granada, Islas Caimán, Islas Vírgenes y Santa Lucía.

En otras palabras, que el fisco y los ciudadanos más pobres dejaron de tener recursos para políticas sociales porque las grandes compañías chilenas fueron favorecidas con este beneficio tributario.

ONG’s que luchan contra los paraísos fiscales advierten que las cifras están totalmente subvaluadas. La británica The Price of Offshore Revisited estima que los fondos latinoamericanos en estos destinos financieros bordean incluso los dos trillones de dólares.

Según sus estudios, las empresas y millonarios brasileños disponen de 520.000 millones de dólares en los paraísos fiscales. Luego vienen México con 417.000 millones de dólares, Venezuela con 406.000 millones de dólares y Argentina con 399.000 millones de dólares. La economía mundial tendría 23 trillones de dólares en estas plazas.

En Chile, país que extraoficialmente se calcula que tiene 50.000 millones de dólares en paraísos fiscales, la reforma tributaria aprobada el año pasado incluyó una amnistía para todos los contribuyentes que tuvieran dineros no declarados en el exterior.

La última información disponible, que data de 2012, indica que el Servicio de Impuestos Internos recibió declaraciones de inversiones en paraísos fiscales por unos 5.000 millones, cifra que según ese propio organismo no concuerda con la realidad.

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