Manuela Gumucio defiende a ME-O: «Estoy segura de que Miguel estaría muy orgulloso de Marco»

A propósito del lanzamiento del libro «Una vida política» (Editorial Planeta), la autobiografía del candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami (PRO), la periodista Manuela Gumucio (74) abordó su vida marcada por su cercanía a algunas de las figuras más relevantes de la historia reciente y el avance en política de su hijo, del que señaló que «me produjo admiración porque no creo que exista ningún político en Chile con reflexión sensible sobre la vida como él».

En entrevista con Revista Paula, Gumucio rememoró la época de vuelta en Chile luego del exilio junto a Marco en Francia, que de acuerdo al texto, estuvo marcada por la discriminación tanto positiva como negativa que vivió, a los 13 años, por ser hijo del líder del MIR, Miguel Enríquez. «Me dio pena lo que le pasó en la universidad, cuando estudiaba Filosofía, de llegar y ver los baños rayados con insultos porque no lo consideraban digno hijo de un revolucionario», describió.

Sin embargo, también señaló sobre su hijo que «hizo bien en ser libre y, como dice en el libro, atreverse a hacer películas frívolas, pensar en política lo que quisiera, no obedecer a las expectativas de la gente».

La periodista también defendió al candidato presidencial con respecto al episodio que protagonizó en el programa «Aquí Está Chile» (Chilevisión y CNN) –donde la periodista Matilde Burgos le preguntó qué pensaría su padre de que haya recibido financiamiento de SQM– y señaló que «no les basta con que haya perdido a su padre asesinado por la dictadura, sino que pretenden, además, que se imagine el pensamiento de un padre que no tuvo la suerte de conocer. Hay que ser muy maldito para eso».

Además, Gumucio sentenció que «odio a los que trafican con los muertos y hasta los hacen revolcarse en su tumba, pero estoy segura de que Miguel estaría muy orgulloso de Marco«.

Finalmente, con respecto a la tercera candidatura presidencial de Enríquez-Ominami, la periodista señaló que » yo estoy maravillada con la fuerza de Marco, que no tengo idea de dónde salió, para pensar las cosas de manera autónoma, para no dejarse aplastar por sentidos comunes idiotas».