11s2012_Via_Laietana | / Wikimedia
Ante la movilización ciudadana, el Ejecutivo español sigue inamovible y reiteró que las autoridades catalanas «responderán ante los tribunales» y que para «defender la unidad constitucional de España y la democracia liberal».
Cataluña enfrenta la recta final para la celebración de su referéndum independentista que tendrá lugar el próximo domingo 1 de octubre. Durante las últimas 72 horas la ciudadanía sigue en pie y la movilización se ha trasladado en los colegios electorales.
Luego de que este miércoles la Fiscalía ordenara a las fuerzas policiales catalanas precintar y tomar el control de los colegios electorales para «prevenir la conformación de las votaciones», la comunidad educativa convocó a los catalanes y catalanas a mantener los centros educativos abiertos y llenos durante todo el fin de semana para sortear la orden del fiscal, que hoy fue recurrida por el Ejecutivo catalán.
Fiestas de bienvenida al curso escolar -que en España empezó hace justo 15 días-, cine-fórums, competencias deportivas y todo tipo de actividades lúdicas se están organizando en varias escuelas con la participación de profesores, alumnos, familias y vecinos.
Assemblea a l’escola Jaume I a Sants. Pretenen fer activitats d’avui fins diumenge. Aquest moviment és pura autoorganització popular pic.twitter.com/ToLqARIaWk
— Joan Canela (@JoanCanela) 29 de septiembre de 2017
La gent és riuada i les escoles no tancaran ✊? via @CDBRaval @CDBPobleSec @CDRGoticRaval pic.twitter.com/OlolWXY6Em
— Thomas Sankara (@tsankaram) 29 de septiembre de 2017
La iniciativa se impulsó desde la plataforma Escoles Obertes [Escuelas Abiertas], que agrupa a los principales sindicatos educativos y el Centro UNESCO de Cataluña, entres otros.
Ante la organización ciudadana, cuya consigna más repetida es la resistencia pacífica, la dirección de la policía regional, los Mossos d’Esquadra, envió una comunicación interna para dar instrucciones sobre la forma en que los agentes tendrán que desalojar a la gente que esté dentro de los recintos electorales. «El uso de la fuerza, ante conductas de resistencia pasiva, no podrá ir más allá del acompañamiento de personas hasta el exterior del centro o para permitir abrir un pasillo que deje acceder a la policía para hacer las comprobaciones y las acciones ordenadas en la interlocutoria judicial», indicó el jefe del cuerpo policial, el Mayor Josep Lluís Trapero, a sus hombres.
Junto con los colegios, los otros protagonistas de las manifestaciones de hoy fueron los agricultores. Más de 200 trabajadores de la tierra se desplazaron hasta Barcelona, desde los alrededores, sobre una cincuentena de tractores, para dirigirse hacia la delegación del Gobierno de la capital catalana.
Sin embargo, su objetivo se truncó a pocos metros de la puerta de la institución al ser retenidos por los Mossos d’Esquadra. Las marchas de campesinos se replicaron en las otras tres capitales de provincia de la región.
Just In>> » Tractors roll into Barcelona ahead of independence vote » https://t.co/gDdn8iYz2v
— Ubertr0_n Nub (@Ubertr0_nNub) 29 de septiembre de 2017
En total, en todo el territorio fueron unos 2.000 tractores los que salieron a las calles.
Por otra parte, esta tarde tendrá lugar el acto final de campaña en el que participarán representantes de todas las fuerzas independentistas así como representantes del brazo regional de Podemos (Podem) y su coalición (Catalunya en Comú), que se unieron a la movilización tras operación policial y judicial emprendida por el ejecutivo español para frenar el referéndum.
Una de las imágenes más esperadas era la de las urnas que el domingo recogerán los miles de votos con la opinión de los catalanes y catalanas sobre la cuestión territorial. La foto llegó finalmente hoy.
Esta mañana, el vicepresidente, Oriol Junqueras, y los «consellers» (ministros) de la Presidencia y Exteriores, Jordi Turull y Raül Romeva, presentaron en un punto de prensa una de las 6.247 urnas que se espera que el domingo estén distribuidas en todo el territorio catalán.
Las urnas son de plástico semitransparente con una tapa negra, precintos rojos y con un logo de la Generalitat estampado en la faceta frontal.
Holaaaa @IMendezdeVigo ? Tenemos #URNAS #DeNada pic.twitter.com/nH412RkJzh
— anna✊NiOblitNiPerdó (@euroeuropa) 29 de septiembre de 2017
«Habrá todas las mesas y los ciudadanos podrán votar. Si alguien intenta impedir el voto, los ciudadanos igualmente podrán votar», aseguró el vicepresidente. Sin embargo, no especificó cuál es la alternativa a votar si la policía cumple las órdenes del TSJC y cierra los colegios electorales previstos.
Por otra parte, también este viernes, el Gobierno catalán, encabezado por Carles Puigdemont, tomó las últimas medidas para proteger a los funcionarios públicos ante las continuas amenazas del Estado español.
La Generalitat retiró a los trabajadores públicos las competencias sobre los equipamientos dependientes de las conselleries de Enseñanza y Trabajo hasta después del 1-O. Con la instrucción, el Ejecutivo pretende descargar de cualquier responsabilidad penal a los funcionarios a cargo de los centros, que ahora recaerá sobre los «consellers».
El Gobierno español de Mariano Rajoy reiteró una vez más su inamovible postura ante la que considera una acción ilegal porque -dice- no está considerada en la Constitución.
El ministro de Educación y portavoz del La Moncloa, Íñigo Méndez de Vigo, indicó que «los dirigentes de la Generalitat y sus socios de la CUP [el partido anticapitalista que apoya al gobierno catalán en la consulta] responderán ante los tribunales, como sucede en cualquier democracia europea» por la convocatoria de un «referéndum ilegal y sin garantías».
«El Gobierno va a hacer cumplir las leyes. Quién las vulnere se deberá enfrentar a sus consecuencias. El Gobierno, en cumplimento de su obligación, va a defender la unidad constitucional de España y la democracia liberal y representativa frente a los que eluden los controles democráticos», insistió Méndez de Vigo.
