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Lo que no se dijo de la formula E y Antofagasta Minerals Grand Prix: El lado oscuro de la electromovilidad

Por: Natalia Contreras Figueroa y Bárbara Jerez | Publicado: 03.02.2018
Lo que no se dijo de la formula E y Antofagasta Minerals Grand Prix: El lado oscuro de la electromovilidad antofagasta |
Es importante dar cuenta que para impulsar la producción de autos eléctricos como los de la Formula E en las condiciones actuales, se sacrifican lugares de nuestro país como el Salar de Atacama, producto de la sobreexplotación para la extracción del preciado elemento químico.

Este 3 de febrero el Centro de Santiago fue testigo de la mayor carrera de automóviles eléctricos. El enfoque de esta carrera estaba en promover una matriz energética verde a través del desfile de autos eléctricos, en donde Antofagasta Minerals Grand Prix se presentaba como principal auspiciador. Empresa la cual ha provocado impactos profundos en el Norte de nuestro país con sus proyectos dentro de la minería.

Territorios como los Salares en el Norte han sido fuertemente impactados y el recurso hídrico de sus cuencas no ha sido si no que la manera en que se ha vuelto posible explotar litio; mineral clave para fabricar baterías de autos eléctricos y como parte de la cadena productiva tecnológica portátil.

Es importante dar cuenta que para impulsar la producción de autos eléctricos como los de la Formula E en las condiciones actuales, se sacrifican lugares de nuestro país como el Salar de Atacama, producto de la sobreexplotación para la extracción del preciado elemento químico. Sin embargo es el propio gobierno el que está de acuerdo con esto, puesto que la CORFO ha autorizado triplicar la extracción de este mineral a una cuota de 349.000 toneladas. Y entonces se trata de una estrategia perfecta, en tanto que Antofagasta Minerals Grand Prix no solo afecta a nuestro norte sino que también al Centro , utilizando el espacio público que a pesar de las compensaciones ofrecidas por intervenir  en  las inmediaciones del Forestal, ha producido un caos propio de las decisiones que son tomadas a modo de “hechos consumados», como bien diría Radrigan “Es el mundo de los que nadie quiere ver, el mundo que a muchos les gustaría ocultar, seres humanos desplazados por el poder político y económico de los que mandan usando la fuerza y el atropello.” Y el mundo donde no se considera en lo más mínimo a la ciudadanía.

La gran molestia por parte de los vecinos de Santiago se traduce al nulo nivel de injerencia que tienen para ser parte de la toma de decisiones que los afecta en lo cotidiano y lo concreto, lo que no nos aleja del malestar que  también  interpelan los  comuneros del salar respecto del  acuerdo firmado  entre SQM y la CORFO, donde se pacta entre élites, el sometimiento de los territorios a una forma autoritaria y centralista de imponer iniciativas sobre los espacios locales, para perpetuar lógicas de desarrollo y sustentabilidad que continúan perpetuando las desigualdades socio territoriales y la marginación de comunidades rurales y urbanas sobre el presente y futuro.

Es penoso entonces ver que se nos comparen con Francia, puesto que no se trata de la misma extensión de terreno, ni mucho menos de la misma cultura y trata hacia la población. Todos sabemos muy bien que en países desarrollados las leyes medio ambientales se hacen respetar y lxs ciudadanos cilicios, en tanto que europeos, bien poco o nada saben de conquistas y saqueos de sus recursos.

Desde este escenario se ha vuelto importante ver más allá de lo atractivo que pueda resultar arrendar los balcones de los edificios para apreciar el desfile de automóviles eléctricos, se trata de pensar y considerar las particularidades de los territorios y a sus habitantes antes de los acuerdos y las firmas entre las autoridades.

La Formula E es un muy claro ejemplo de paradoja entre la utilización del espacio público y los recursos naturales que socialmente generan expectativas y descontento al momento de hablar de calidad de vida, sustentabilidad y buen vivir.

Natalia Contreras Figueroa y Bárbara Jerez