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La autora del reconocido libro «La doctrina del shock» dispara contra Donald Trump, los Panama Papers e incluso el productor de Hollywood Harvey Weinstein. «¡Vemos tantos ejemplos de la impunidad de la riqueza en nuestra sociedad!», acusa.
Su libro «La doctrina del shock. El auge del capitalismo del desastre» de 2007 no solo causó revuelo a nivel mundial por sus críticas a las políticas de Milton Friedman, postulando que éstas ven en cada tragedia o trauma colectivo una oportunidad para frenar el intervencionismo de Estado sobre el mercado y favorecer a grandes empresas, sino que también se volvió una lectura obligatoria en Chile, al tomarlo como un claro ejemplo de la aplicación de esa doctrina en la dictadura de Augusto Pinochet.
La periodista y escritora Naomi Klein acaba de lanzar en español su libro «Decir no no basta», una obra que tiene varias páginas dedicadas a las medidas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
«Trump es otro tipo de Doctrina del Shock», dijo en conversación con Culto de La Tercera.
Luego agregó: «Hemos de entender a Trump como una advertencia para todas las sociedades, como una cultura que celebra la riqueza por encima de todas las cosas, abriendo el gobierno a las corporaciones, privatizando la esfera pública, expandiendo la impunidad para los ricos. Se puede ver en la reciente publicación de los Paradise papers o encarnado en el poderoso Harvey Weinstein, que ejerció el poder sobre las mujeres y que con sus propios espías estaba encima de la ley. ¡Vemos tantos ejemplos de la impunidad de la riqueza en nuestra sociedad! Trump es un síntoma de la crisis pero no la crisis en sí».
«Con Trump es el shock infinito, sin descanso, diseñado para distraer y poder aplicar cambios diarios. Su administración ha hecho un golpe de Estado corporativo. Era exactamente lo contrario de lo que dijo en su campaña, que era tan rico que no necesitaba el dinero de las corporaciones y que iba a hacer frente a Goldman Sacks y todos los lobbies. Prometió proteger el sistema de salud, traer de vuelta los trabajos sindicalizados y no hizo nada de eso. Este gobierno ha sido una mentira. Todas sus políticas han sido las de transferir dinero de la gente normal hacia los más ricos de los más ricos a través de un sistema tributario. Nada de esto es sorprendente», señaló la también autora de los libros «No Logo» (1999), «Vallas y ventanas» (2003) y «Esto lo cambia todo» (2014).
A propósito de su nuevo libro «Decir No no basta» -frase que viene luego de que el primer ministro griego Alexis Tsirpas le dijera que con decir no era suficiente-, la autora señaló que se vio que movimientos como los indignados de España o Occupy Wall Street en Estados Unidos carecieron de una capacidad para crear una narrativa a futuro: «La crisis real era de imaginación. No vimos suficientemente claro eso. El proyecto neoliberal tuvo éxito. Su gran triunfo ha sido convencernos de que sin ellos no hay alternativa».
Ahora bien, la autora negó ser partidaria de la autocomplacencia de tildar a los americanos de locos y ver al resto como cuerdo. «Europa no puede sentirse superior. Trump es tan personaje que los demás se ven como unos santos. Pero mira a Macron en Francia. Se presenta como la alternativa pero sus políticas fiscales son tan pro ricos como las de EEUU. Las políticas de Trump son indignantes, como querer construir un muro con México. No sabemos si lo hará finalmente. Pero actualmente Europa deja morir a miles de refugiados en el mar y permite que un gobierno represor (Turquía) intercepte a las personas y las encierre en campos de concentración para que no entren en Europa. Eso es peor que cualquier cosa que pueda estar haciendo Trump ahora mismo».
