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La jugadora acaba de firmar por el Gremio Audax de Brasil y se encuentra en Chile preparando la Copa América que se disputará en abril: «Jugar en casa nos da un plus. Estar cerca de nuestras familias yo creo que es muy importante. Chile está para hacer un muy buen papel», adelanta.
A sus 27 años, Karen Araya disfruta de su buen presente deportivo. Hace pocos días firmó por el Gremio Audax de Brasil, luego de defender durante años los colores de Santiago Morning y Colo-Colo. En el conjunto albo, fue incluso la capitana del plantel histórico que alcanzó la Copa Libertadores en 2012.
Hoy, la futbolista se encuentra en Chile, preparando con sus compañeras la Copa América que se disputará en abril en nuestro país. De hecho, este jueves se realizará el sorteo: «Jugar en casa nos da un plus. Estar cerca de nuestras familias yo creo que es muy importante. Chile está para hacer un muy buen papel, pero más que decir que vamos a ganar o cualquier otra cosa, hay que pensar en que vamos a hacer las cosas bien«, enfatiza al respecto.
A su juicio, en el fútbol femenino la competencia es diferente a como se concibe la calidad de algunas selecciones masculinas: «Tengo compañeras venezolanas y colombianas en Brasil y andan todas muy parejas. Creo que decir una o dos en particular sería subestimar a las demás», declaró a La Tercera.
Karen Araya aseguró que «todo futbolista sueña con jugar afuera. Para nosotras cumplir ese sueño y ayudar a que otras lo cumplan es espectacular. Antes las niñas pensaban que no sacaban nada con ser futbolistas, pero ahora no es así, hay más puertas».
Además, celebró su oportunidad de ir a Brasil, recalcando que «me voy a un país en donde se respira fútbol. Es como un sueño. Llevo poquitos días allá, pero me han tratado súper bien, mis compañeras son simpáticas y de a poco me están ayudando con el tema del idioma».
En este escenario, sus objetivos serán prepararse y rendir de buena forma en los tres campeonatos que se disputan al año: el Brasileirao, Paulista y la Copa Libertadores. Tuvo ofertas de Colombia, pero su papá le aconsejó que no lo pensara más y se fuera a Brasil.
«Antes en Chile el fútbol femenino era nada, pero de a poco ha ido mejorando. El tema del Mundial 2008 ayudó mucho. En la actualidad se generan mejores contrataciones de técnicos y jugadoras, lo que nos beneficia», cerró la mediocampista.
