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110 mujeres han firmado una carta donde cuestionan duramente a los varones diputados que le quitaron peso a la acusación al ministro de salud por el protocolo de objeción de conciencia. Diputada Emilia Nuyado -una de las dos del PS que sí firmaron el texto- apunta a celos de figuración entre las bancadas y a que sean más mujeres las que lideren los partidos políticos.
El pasado jueves 17, diez diputadas de distintos partidos de la oposición ingresaron formalmente la acusación constitucional en contra del ministro de Salud, Emilio Santelices, por sus actuaciones con el protocolo de objeción de conciencia, el que fue declarado ilegal por la Contraloría.
Entre ellas estaban dos diputadas del Partido Socialista: Emilia Nuyado y Daniela Cicardini.
Ese misma mañana, parlamentarios hombres del mismo partido enviaban el mensaje contrario. «El PS ha analizado que no se ve fundamento jurídico y tampoco viabilidad política”, dijo Juan Luis Castro. Leonardo Soto, por su parte, aseguró que el fin del partido no será «derribar al ministro».
La acusación a Santelices y el movimiento feminista que se ha tomado la discusión pública en el país han revuelto el gallinero al interior del propio PS, a raíz de una carta enviada por el Frente Feminista Socialista, en la que critican duramente a los varones diputados por no adherir a la acusación.
En la misiva relatan que tanto Nuyado como Cicardini «han sido severamente reprochadas por sus propios compañeros de bancada, es decir militantes del Partido Socialista. Lo que ellos desconocen es que en comunas como Huasco y Osorno, distritos que representan ambas compañeras, la objeción de conciencia de las instituciones hospitalarias alcanza un 100%, teniendo una responsabilidad mayor de proteger y resguardar el acceso de esta relevante política pública a las mujeres de dichos territorios».
El grupo llama a la bancada parlamentaria a respaldar la acusación a Santelices -que será votada el próximo 29 de mayo- y a «representar de forma sustantiva las demandas de las mujeres socialistas en el Congreso Nacional. El aborto libre es una de las demandas históricas del movimiento feminista chileno. Aun cuando éste ha quedado limitado solo a tres causales, es deber de nuestras y nuestros senadores y diputados, abogar por el estricto cumplimiento de la ley, y garantizar su acceso a niñas y mujeres que requieran interrumpir su embarazo».
Diputadas de oposición presentaron acusación constitucional a Santelices
En conversación con este medio, la diputada Emilia Nuyado asegura que no hubo mucha discusión al interior de la bancada socialista respecto a la acusación, sino que se remitió a un análisis jurídico elaborado por el abogado Enrique Aldunate, lo que fue suficiente para que «los que lideran el partido», estimaran que «el sustento jurídico del Frente Amplio no daba para una acusación constitucional».
La parlamentaria mapucha-huilliche afirma que respaldó la acusación por la situación que se vive en Osorno, donde médicos con objeción de conciencia se han negado a hacerse cargo de la tercera causal. Además, dice que no hubo presiones hacia ella y que se le respetó su decisión de apoyar la medida, pero que en el fondo de esto también está el desorden de las bancadas de oposición en el Congreso que no dialogan entre ella.
«Respetamos el análisis que hicieron, pero no compartimos la mirada jurídica de quienes lideran el partido», dice tajante Nuyado. «Ellos están claros en lo que ocurrió y no critican el fondo de la acusación, sino la forma de cómo la hizo el Frente Amplio», agrega.
Para la parlamentaria, hay recelos de figuración entre las bancadas para liderar un tema como este: «El actuar del ministro da para una acusación constitucional. Las mujeres de Chile tienen esa claridad y el partido también, el problema que se generó es por los celos de actitudes internas de las bancadas, el quién genera más connotación, quien lidera».
En ese sentido, recalca la importancia de que, pese a los rechazos oficiales de las bancadas, hayan sido mujeres de todos los partidos de la oposición las que suscribieron a la acusación. «Una entra en contradicción porque los que lideran son hombres y no mujeres. Por eso solo la suscribimos mujeres y eso es importante, hay mujeres que debieran liderar las bancadas y avanzar en igualdad y respeto. Las mujeres no le dimos vuelta a pensar y repensar el análisis jurídico, porque a la vista estaba el protocolo por el que el ministro debe ser acusado«, afirma.
Emilia Nuyado, la primera mujer mapuche-huilliche en ser diputada / Agencia Uno
Milenka Toro, participante del Frente Feminista Socialista que envió la carta ala bancada, asegura que, hasta el cierre de esta nota, más de 110 mujeres militantes han suscrito al llamado.
El Frente Feminista del PS nació como un espacio independiente a la estructura del partido, con el fin de instalar el tema del feminismo a la interna, así como cambiar la cultura interna del partido, según explica su vocera.
Toro asegura que «hay una deuda histórica del partido hacia nuestras demandas» y cita a Julieta Kirkwood para dar cuenta de que siempre las mujeres socialistas «han militado» el feminismo por fuera de la estructura partidaria. Esto por el rol secundario que se le ha dado al tema.
«Si la bancada no apoya la acusación, está dando la espalda al movimiento feminista y avalando la ilegalidad del ministro con el protocolo de objeción de conciencia», afirma Toro.
La carta -disponible en este link- ya fue enviada a la Comisión Política del PS.
