Kevz lgbti portada | Fotos: Felipe Carmona
Se hizo conocido en el programa de Canal 13 «Amango» hace más de 12 años. Hoy, tras recorrer un camino más empinado y alternativo que el resto de sus compañeros de elenco, Kevz se presenta como un prometedor cantante, compositor y productor que reivindica su homosexualidad como uno de sus principales discursos en su música.
El nombre de Kevin Vásquez (25) comenzó a sonar a mediados del 2007, cuando integró uno de los proyectos musicales juveniles más exitosos de los últimos años, «Amango», el programa de Canal 13 que giró por todo Chile e incluso se presentó el 2008 en el Festival de Viña del Mar.
El grupo compuesto por Denise Rosenthal, Augusto Schuster, Magdalena Muller, André Ubilla, entre otros, tenía a Vásquez como la voz principal. Según muchos, el joven era el más talentoso del proyecto, pero eso no fue coherente con las oportunidades y contratos que se ofreció en ese tiempo al elenco.
Hoy, alejado de esa escena, el músico reivindica la homosexualidad que algún momento le significó burlas. Bajo el nombre de «Kevz», pavimenta una prometedora carrera como un explícito artista pop.
Hace unos meses lanzó su primer mini álbum como solista titulado «Homoerötico«, matizando su trabajo anterior donde realizada covers en español de canciones anglo de moda junto a su hermana Karla Vásquez. Por ahora, prepara su segundo proyecto de estudio, donde realizará colaboraciones con los músicos Gonzalo Yañez y Nick Bolt. «Esta segunda parte habla más de la cotidianidad de nosotros los gays», adelanta.
—¿De dónde nace la idea de hacer este nuevo disco tan distinto a lo que venías haciendo?
—Nació netamente de realización personal, porque siempre viví súper reprimido. Mi familia, tíos y primos son cristianos evangélicos, y al momento de salir del clóset causó repercusión en mi familia porque dentro de la iglesia hay jerarquías y mis tíos están muy bien posicionados como pastores u obispos. Cuando yo salí del closet, y de esta manera tan expuesta, no les pareció mucho, pero mi familia cercana, mi mamá, mis hermanos, están súper contentos con lo que estoy haciendo. Me encuentran súper valiente y están orgullosos de lo que he logrado. Siempre quise hacer esto. Desde chico siempre quise ser un exponente LGBTI y cantante. Me gusta caleta hablar de los temas que son contingentes en la comunidad, con anécdotas para que la gente se identifique.
El 26 de noviembre el músico lanzó el videoclip de su segundo single de «Homoerötico» titulado «Acäbame». La versión original fue publicada en la página porno XVIDEOS, debido a las sensuales escenas que incluye. «Mucha gente me criticó diciendo que ya era mucho, pero quienes son ellos para ponerme límites a mí. Ellos pasan cuatro horas viendo porno y pajeándose en sus casas. Es una hipocresía súper estúpida», reclamó.
Este 29 de diciembre, Kevz lanzó su primer álbum. El disco de siete canciones fue presentado con el tema «Cerro Alegre», que hoy suma más de 200 mil visualizaciones en YouTube desde su publicación en septiembre de 2018.
«Gracias a dios yo me siento súper exitoso. No tengo las reproducciones de Mon Laferte o Paloma Mami, pero me siento el más exitoso de la vida por hacer lo que realmente me gusta y mostrar algo distinto. Yo creo que por eso las personas que hacemos este tipo de material no hemos podido llegar al medio convencional, porque es chocante de ver», opinó.
—A propósito de eso, ¿por qué crees que tu proyecto no ha estado presente en espacios tradicionales?
—Esto no lo hice por querer adquirir fama. Ya pasé ese proceso con Amango, donde teníamos giras casi todos los días en verano, y es un estilo de vida que sí me agrado en su momento, pero era muy desgastante. Tampoco me llenaba porque no eran mis canciones. Cuando me encontré y dije «esto es lo que soy, esto es lo que me llena», lo otro ya pasó a segundo plano, viene por añadidura.
«Lo mío es totalmente explícito. Yo no me veo escuchando mis canciones en la radio. Sé que no las van a poner, tendría que eliminar la mitad de la letra para que la pudieran programar, en televisión es lo mismo. (…) Yo creo que mi trabajo se va a validar solo. En algún momento va a llegar punto en que diga ‘esto en verdad se disparó'», declara Vásquez sobre sus intenciones llegar a un público masivo.
—Hace un rato dijiste «gracias a dios», ¿todavía eres creyente?
—Totalmente. Soy súper creyente. Mis ataques son hacia la iglesia. Yo creo firmemente en dios y no lo voy a negar. Creo que por él estoy acá y me siento súper avalado por él. No me siento en desaprobación ante dios. Si tú me preguntai, es mi partner. Es lo que yo siento, no es que me lo diga la biblia, si te ponís más exacto pa’ la hueá, te dirán que en tal parte dice que dios aborrece a los homosexuales, pero no me vengai con estupideces, porque eso lo escribió un hombre.
—Has trabajado como productor de tu propio proyecto y de otros músicos, ¿cómo ha sido eso?
—Me encanta. Ser productor es mi segunda pasión más grande. Soy una persona a la que le gusta crear en todo momento. A veces voy en el metro y le mando una nota de voz cantando a mi hermano para guardarla. Ha sido genial que la gente que me ha contratado me diga «necesito tener una gota de ti en mi canción». Me pasó con Vesta Lugg, que fue una de las personas que me dio una vitrina súper grande para mostrar lo que hago, porque la gente la tenía en un estereotipo cero de cantante. Y agarró un público muy fuerte gracias a lo que hicimos juntos y eso para mí es una validación tremenda.
Sobre sus próximos pasos, adelanta que en su próximo EP lanzará colaboraciones con los músicos Nick Bolt y Gonzalo Yáñez. Anteriormente ha trabajado con artistas como Vesta Lugg, Namuel y el representante de Chile en el Festival de Viña del Mar, Neven Ilic.
Kevz cuenta que el mundo gay lo trata bien y que mediante sus redes sociales frecuentemente le expresan su cariño. «Nunca he sido una persona pretenciosa o que quiera solo brillar y obtener fama. Si quisiera eso, no hubiese hecho lo que estoy haciendo, porque estoy con todos los medios habituales en contra. Hoy todos quieren hacer algo más urbano, más latino, porque está de moda y para pegar en la radio, para salir en televisión. Yo vacilo en la disco el reggaetón y toda la gama de lo urbano, pero creo que hay mucha gente haciéndolo bien, pero haciendo lo mismo«, explicó.
Vásquez cuenta que hace un tiempo decidió que quería hacer música pop. A pesar de ser un estilo clásico, la propuesta del músico cuenta con matices distintos a otros músicos chilenos de esta línea como Alex Adwandter, Javiera Pena o Francisca Valenzuela. El proyecto de Kevz tiene influencias más anglosajonas, electrónicas y bailables.
«Al momento de pensar qué me identifica como artista noté que el pop estaba totalmente de lado, sobretodo el pop en español. Le di mi toque con letras hablando de sexo, de amor, etc., enfocado el público LGBT de manera explícita y creo que ahí está mi estampa. Yo dedico horas, días, meses, años a lo que estoy haciendo y me gustaría que la gente lo tome en cuenta. Que no sea solo una canción pegote y listo», comentó.
—¿Crees que tu forma de enfrentar la vida y tu sexualidad es un aporte para los chicos que están saliendo del clóset?
—Yo ahora tuve un proceso de cambio en mis seguidores, porque en un inicio con Karla cuando nos hicimos conocidos en YouTube hacíamos covers de artistas Disney, con un material súper blanco por decirlo de alguna forma. Hoy soy todo lo contrario a lo que fui años atrás. En un momento con Karla hicimos música cristiana y si lo comparas con ahora es un cambio en 180 grados. Hay un cambio de público, ahora estoy totalmente segmentado en el público que quería, que era el público gay y la gente que nos apoya. Me tiene súper contento el cambio, porque así soy, así me siento y la gente ve a una persona real, que sufre, que se enoja, que no tiene tapujos ni tabú en decir nada.
—¿Eres cercano a las demandas de la población LGBTI? ¿Te consideras activista?
—Totalmente activista. Para la última marcha tenía grabación agendada, así que ojalá me inviten a cantar a la próxima. Me gustaría comunicar lo que pienso. Ya no quiero estar callado. Tengo mis ideales y quiero que esto no sea nunca más un tabú, que la gente ya no se moleste ni me mire raro si salgo vestido así a la calle.
Foto: Felipe Carmona
Dado el contenido de su música y su propuesta estética, Vásquez cree «en un 90%» que no lo van a invitarían «a un programa en la tele si conocen mi trabajo de ahora. Pero sí se da obvio que voy a aprovechar de hablar y mostrar todo lo que estoy haciendo».
—¿Cuáles son los detalles que más destacarías de tu paso por la televisión siendo tan pequeño?
—Siempre he sido el distinto. Me tocó ser el distinto de mi familia, en Amango también. Yo era el gordito gay que cantaba. En ese entonces era chocante de ver yo creo. Obviamente un gordo afeminado era blanco de burlas. Yo en ese tiempo decía: “¿por qué me atacan así si soy un niño, si no le hecho daño a nadie, si soy así y qué le voy a hacer?”. También me preguntaba qué está pasando en el país. Si esto hubiese pasado en Chile de hoy, yo estaría ganando todas las demandas habidas y por haber a los canales por bullying. La sociedad ha cambiado, me hubiese encantado estar en Amango ahora. Pero yo me hice más fuerte. Todos esos momentos que viví cuando chico me hicieron la persona que soy ahora.
«Me siento orgulloso de todo lo que he logrado, pese a que no se me dio como a Denise Rosenthal o Augusto Schuster, que yo los adoro. Pero yo estaba en constante desaprobación pese a todo el talento que tenía para mostrar», sinceró.
—¿Te molesta ser recordado como ex chico Amango?
—Sí y no. Yo no le hago asco al pasado, porque gracias a eso soy lo que soy ahora, pero creo que la gente está muy pegá, porque tengo toda una trayectoria que trasciende los años de Amango. Ahí solo interpreté un personaje, interpreté canciones que no eran mías. Acá estoy siendo productor, cantante y compositor, entonces que la gente sólo se quede con lo de Amango me da un poco de rabia igual. Pero cero problemas en presentarme como el ex chico Amango, porque lo soy. Ojalá en un futuro cercano la gente valore más lo que estoy haciendo ahora.
—¿Tienes relación con tus ex compañeros de Amango o Yingo?
—No, pero a todos los quiero caleta. Jamás congenié una amistad con ellos, eran mis compañeros, nos teníamos mucha buena, pero con ninguno me junto a tomar un café o a contarnos la vida. Perdimos el contacto yo creo porque todos estamos en cosas muy distintas. Además, antes era súper introvertido y me cerraba a la buena onda que la gente me quería dar.
Foto: Felipe Carmona
