«Algunos argumentan con los ‘200 años de tradición’. También fue una tradición la esclavitud o que mujeres no tuvieran derecho a voto. Las sociedades evolucionan y que un grupo haya sido discriminado en el pasado no justifica que esa discriminación continúe», fue uno de sus argumentos.
El pasado viernes 29 de marzo, en el Instituto Nacional General José Miguel Carrera se llevo a cabo un proceso de votación donde se decidió si el colegio pasaba o no a ser de carácter mixto.
En dicha instancia tuvieron la posibilidad de participar los alumnos, docentes, apoderados y la dirección del emblemático establecimiento. Concluidos los sufragios, durante la tarde del viernes, se conoció que la decisión de la comunidad escolar era continuar siendo un colegio solo para hombres.
Desde distintos flancos, se esbozaron críticas y dudas sobre lo democrático del proceso. Por lo mismo, el periodista de CNN Chile, Daniel Matamala, se refirió a la polémica mediante un hilo explicativo en su cuenta de Twitter.
Según el comunicador, «el proceso no es democrático» y sostiene que «no todo se puede decidir por votación».
De esta forma, el periodista pone como ejemplo: «Si la comunidad del IN votara mayoritariamente por prohibir el ingreso de judíos u homosexuales al colegio, ¿sería legítima esa decisión? No, porque viola el principio democrático de respeto a los derechos de las minorías», indica.
«Entonces, ¿por qué sí sería legítima una discriminación igual de arbitraria contra las mujeres, prohibiéndoles la entrada por el solo hecho de su género? ¿Porque ‘lo decidió la mayoría’? No es suficiente como criterio democrático», agrega.
En esa línea, el periodista hizo alusión al apartheid sudafricano para explicar que el proceso incluye vicios de exclusión. «En el caso del IN, los discriminados (las jóvenes excluidas por su género y sus familias) también quedan fuera del universo electoral. Es un caso interesante porque una comunidad conformada en base a una arbitrariedad es la que vota para mantener esa misma arbitrariedad», comenta.
«Aquí algunos argumentan con los ‘200 años de tradición’. También fue una tradición la esclavitud o que mujeres no tuvieran derecho a voto. Las sociedades evolucionan y que un grupo haya sido discriminado en el pasado no justifica que esa discriminación continúe», agrega Matamala.
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Sobre votación en IN, he leído mucho que “lo decidió la mayoría, es votación democrática, fin de la discusión”. Hay tres conceptos que precisar ahí sobre por qué me parece que ese proceso NO es democrático
(HILO, ALERTA DE LATAZO)😬— Daniel Matamala (@DMatamala) April 1, 2019
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Para poner un ejemplo extremo, si el 90% de los chilenos votara por encerrar a judíos (u homosexuales, o haitianos) en un campo de concentración, ¿sería esa una decisión legítima porque “la tomó la mayoría”? Evidentemente no, porque viola los derechos de una minoría.— Daniel Matamala (@DMatamala) April 1, 2019
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Entonces, ¿por qué sí sería legítima una discriminación igual de arbitraria contra las mujeres, prohibiéndoles la entrada por el solo hecho de su género? ¿Porque “lo decidió la mayoría”? No es suficiente como criterio democrático.— Daniel Matamala (@DMatamala) April 1, 2019
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Un segundo problema es que en el caso del IN el concepto de “mayoría” es discutible, porque está construido en torno a la exclusión de otro grupo. El ejemplo más claro para entender ese problema es el Apartheid en Sudáfrica.— Daniel Matamala (@DMatamala) April 1, 2019
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En el caso del IN, los discriminados (las jóvenes excluidas por su género y sus familias) también quedan fuera del universo electoral. Es un caso interesante porque una comunidad conformada en base a una arbitrariedad es la que vota para mantener esa misma arbitrariedad.— Daniel Matamala (@DMatamala) April 1, 2019
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Por ejemplo, si la comunidad del IN decidiera por votación mayoritaria dedicar el 100% de las clases al estudio del marxismo, ¿sería una decisión aceptable? Claro que no, ya que afectaría calidad y pluralismo de una institución que trasciende a quienes están hoy en ella.— Daniel Matamala (@DMatamala) April 1, 2019
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Y a los que me han preguntado si lo mismo aplica para los colegios públicos que hoy son sólo de mujeres, mi respuesta es: por supuesto que sí, por las mismas razones ya expuestas.
(FIN)😓— Daniel Matamala (@DMatamala) April 1, 2019