Los seis estudiantes quedaron en libertad y cinco de ellos con firma mensual durante dure la investigación. El Centro de Padres y Apoderados denunció una criminalización en contra de estos jóvenes ya que «se les acusa de haber comido delitos sin pruebas fehacientes, vulnerando todos sus derechos».
Esta tarde se realizó el control de detención en contra de los seis estudiantes acusados de rociar con bencina a la piscopedagoga del liceo Darío Salas durante una protesta al interior del establecimiento. Los estudiantes, que fueron detenidos durante un procedimiento en la noche de este jueves, quedaron en libertad y con la medida cautelar de firma mensual durante el transcurso de la investigación.
La Fiscalía descartó la formalización por homicidio frustrado solicitada por el Ministerio Público y sólo los imputó por los delitos de amenazas y Ley de Control de Armas. Tres de ellos eran estudiantes del liceo y otros tres ex estudiantes mayores de edad.
Uno de los jóvenes quedó libre y sin medidas cautelares, mientras que las otras cinco personas quedaron en libertad pero con firma mensual.
El abogado de los estudiantes, Washington Lizana, señaló que la Fiscalía determinó 60 días de investigación y que los jóvenes pasará este proceso en libertad.
El Centro de Padres y Apoderados del liceo Darío Salas condenó «todo hecho de violencia que afecte a la comunidad»y rechazó la detención de los seis estudiantes ya que se trata de una criminalización sin pruebas y que vulneran los derechos de estos jóvenes.
“Rechazamos la criminalización a la que están siendo sometidos nuestros estudiantes, ya que se les acusa de haber comido delitos sin pruebas fehacientes, vulnerando todos sus derechos”, señalaron los apoderados a través de un comunicado.
El CEPA agrega que las expulsiones de más de 25 alumnos a través de Aula Segura han causado conmoción entre las y los estudiantes, debido a que muchos de estos procesos «no han contado con las garantías mínimas y han vulnerado derechos fundamentales, incluso de adolescentes migrantes, por parte de la dirección del liceo”.
Además denuncian años de «procesos inestables» en la dirección del liceo, lo que ha provocado que «se vulneren permanentemente los DD.HH. de los y las estudiantes, al no otorgarles contención, acompañamiento psicosocial y las condiciones adecuadas para su desarrollo integral”.
