El presidente ultraderechista apoyó la idea del ministro de educación de reducir la inversión en filosofía y sociología. Según Bolsonaro, el gobierno debe centrar sus esfuerzos en carreras que generen empleo y renta como Veterinaria, Ingeniería o Medicina.
El presidente ultraderechista brasileño, Jair Bolsonaro, confirmó que el Ministerio de Educación reducirá la inversión en las carreras de Filosofía y Sociología en favor de otras que generen «empelo y renta», ya que según Bolsonaro estas no generan un retorno a la sociedad.
Mediante un twitter, el presidente brasileño respaldó la propuesta del Ministro de Educación Abraham Weintraub. «El ministro de educación estudia descentralizar la inversión en facultades de Filosofía y Sociología (humanistas). Los alumnos ya matriculados no se verán afectados. Nuestro objetivo es centrarse en áreas que generen un retorno inmediato al contribuyente, como Veterinaria, Ingeniería y Medicina».
O Ministro da Educação @abrahamWeinT estuda descentralizar investimento em faculdades de filosofia e sociologia (humanas). Alunos já matriculados não serão afetados. O objetivo é focar em áreas que gerem retorno imediato ao contribuinte, como: veterinária, engenharia e medicina.
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) April 26, 2019
Luego Bolsonaro añadió que «la función del gobierno es respetar el dinero del contribuyente, enseñando a los jóvenes a leer, escribir y hacer cuentas y luego un oficio que genere ingresos para esa persona y el bienestar de su familia, que mejore la sociedad de vuelta».
La decisión del gobierno brasileño ha generado una ola de críticas de organizaciones y sindicatos de trabajadores y académicos de la filosofía y la sociología. El Frente Parlamentario por la Valorización de las Universidades Federales y el Observatorio del Conocimiento manifestaron que «no hay nación desarrollada en el mundo que no tenga una fuerte inversión en campos de estudio como los de la filosofía y la sociología».
La propuesta nuevamente pone sobre la mesa el ideario fascista de Bolsonaro y compañía, ya que su iniciativa de reducir la filosofía y la sociología, recuerda los gritos proferidos por los adherentes de la dictadura de Francisco Franco en España que llamaban a la muerte de la inteligencia.