El inédito plan de la Fiscalía para terminar con los fuegos artificiales y disparos en funerales narco

Cada vez se ha hecho más frecuente la presencia de fuegos artificiales, bengalas y disparos al aire en los funerales de personas ligadas al narcotráfico y/o la delicuencia.

De esta forma, varias han sido las comunas y familias que se han resultado afectadas por estas situaciones. Ejemplo de ejemplo de esto es el caso de una población en La Granja, donde más de 100 casas resultaron afectadas por balazos, poniendo en riesgo la vida de sus habitantes. 

Ante estas situaciones, la Fiscalía Sur presentó un plan de vigilancia e intervención de funales de personas con antecedentes penales. Este nuevo protocolo titulado «Funerales de alto riesgo» considerará la participación de Carabineros, la Policía de Investigaciones (PDI), el Servicio Médico Legal (SML), los hospitales, las autopistas e incluso las funerarias.

El fiscal jefe de la Unidad de Focos Sur, Patricio Rosas, comentó que «estamos hablando de delitos que ocurren en el marco de estos ritos: disparos al aire en las caravanas, el uso de autos robados, presencia de personas con órdenes de detención vigentes, que ponen el riesgo la seguridad de toda la ciudadanía. Por eso la importancia de este protocolo”.

Esta idea ha recibido el apoyo del gobierno mediante la subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, quien aseguró que «el uso de pirotecnia en los funerales -que no siempre está vinculada a hechos de narcotráfico- ha generado mucha sensación de temor en la población».

El plan de la Fiscalía considera las siguientes etapas:

1. Luego de detectarse la muerte de alguna persona ligada a un grupo criminal, se emite un orden de investigar.
2. Tras esto, la PDI se dirige al Servicio Médico Legal u hospital de deceso para identificar a sus cercanos y saber cuál será la funeraria que presentará servicios a la familia y dónde será enterrada la persona.
3. Posteriormente, en el velatorio, se detectará mediante vigilancia discreta si hay vehículos involucrados en delitos. También se realizará controles de identidad selectivos.
4. Al momento de iniciar la caravana, habrá resguardo de Carabineros, quienes tratarán de guiar el cortejo hacia calles con cámaras de vigilancia. En paralelo, el sepelio será grabado para registrar delitos flagrantes.
5. En el retorno y cierre, se mantendrá la vigilancia. Igualmente, se podrán solicitar medidas intrusivas como interceptaciones telefónicas y órdenes de entrada, registro e incautación contra personas de interés detectadas durante el funeral.