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Estos fragmentos de la carta de despedida que la cantautora nacional habría dejado a su hermano Nicanor, corresponden a uno de los perfiles del libro «Extremas», que recoge las historias de 13 mujeres latinoamericanas reconocidas mundialmente por su legado.
“Si juntamos dos mil hombres no alcanza a salir de ellos un cuarto de hombre.
Desesperada, nada. Clarificada.
Dice uno por ahí que los Parra son cortados a una misma tijera. El que lo dice debe haberlo cortado por un serrucho.
Yo no me suicido por amor. Lo hago por el orgullo que rebalsa a los mediocres”, se lee en la misiva que Violeta Parra le escribió a su hermano Nicanor antes de suicidarse.
Esta carta fue revelada por la periodista Sabine Drysdale, en el marco del libro «Extremas» de la Universidad Diego Portales. Esto es publicado a más de 50 años de que la popular cantautora nacional decidiera quitarse la vida con un disparo en la sien.
Según publica La Tercera, el domingo 5 de febrero de 1967, Violeta Parra habría trabajado horas en una carta que fue encontrada en su regazo, cuando ya la artista se había provocado la muerte. Esta misiva estaba dirigida a su hermano Nicanor Parra, con quien había almorzado el día anterior, y su contenido se había mantenido en la intimidad de la familia hasta ahora.
“Mi madre es una reina mañosa.
La Carmen Luisa despertará frente al vacío que deja su madre.
Me cago en los discursos de despedida.
(…)
Los revolucionarios clandestinos le han quitado una luchadora al país.
No tuve nada. Lo di todo. Quise dar, no encontré quien recibiera.
Angel está prisionero. Isabel también. Carmen Luisa también, pero de la nebulosa. Y no como los anteriores huevoncitos grandes. Los deslumbran los encerados.
Pucha qué gran tipo es Nicanor. Sin él no habría Violeta Parra. Pero al pobre yo le escondo todo porque le rompe el corazón.
El Presidente Frei es un farsante. Fidel es un romántico. Lenin se equivocó.
No quiero que mis hijos sean más cobardes”, se refiere la cantautora en duros términos hacia sus hijos y familiares, excepto a su hermano Nicanor, para quien solo tiene palabras de afecto.
Estos fragmentos de la última carta de Violeta Parra son parte de un perfil realizado por la periodista Drysdale en el «Extremas», escrito que recoge 13 historias de mujeres latinas reconocidas por su legado y entregadas a su labor, desde diversas áreas del conocimiento, deportes y profesiones u oficios.
