Avisos Legales
Cartas

Los lugares comunes contra la protesta

Por: Francisca Quiroga | Publicado: 25.10.2019
Los lugares comunes contra la protesta foto 3 | Foto: Elena Bulet, fotoperiodista en Santiago.
El autor revisa los diferentes argumentos que se han articulado en contra de la protesta social, para luego someterlos a escrutinio, con la esperanza de ofrecer claridad en momentos de oscuridad. Los lugares comunes del discurso sobre la protesta social son contrapuestos.

En estos días tanto el gobierno, políticos e intelectuales, han mirado los lamentables sucesos ocurridos en Santiago con una mirada selectiva, poniendo atención a ciertos hechos y descartando otros. En este escenario, urge pensar a contrapelo, a saber, es saludable pensar en el sentido contrario al que nos lleva la inercia. En consecuencia, en lo que sigue, revisaré los diferentes argumentos que se han articulado en contra de la protesta social, para luego someterlos a escrutinio, con la esperanza de ofrecer claridad en momentos de oscuridad.

1.“Los estudiantes no tienen argumentos para protestar”. En los primeros días de la evasión, la ministra Hutt, sostuvo que los estudiantes no tienen argumentos -válidos – para protestar, pues ellos, señala, no se le subió la tarifa. Este argumento nos intenta decir que, debemos sufrir en carne propia los hechos “X” para poder protestar por “X”. Un sinsentido, la injusticia no es un asunto personal, sino son una serie hechos lamentables y no queridos los que todos racionalmente podemos calificar y rechazar. Por tanto, no necesitamos sufrir, necesariamente, de primera mano para poder empatizar, pensar y protestar.

2. “La protesta pasa a llevar otros derechos”. Quizás es el argumento más recurrente, este alude que la protesta es injusta e ilegal – o derechamente inconstitucional-, dado que, pasa a llevar derechos, o bien, transgrede el manoseado aforismo jurídico “tus derechos comienzan cuando terminan los míos”. El problema con esta frase, particularmente, es que no resuelve nada; ocurre que tal expresión es tan solo el punto de partida de la discusión. Todos los días, y en cada momento, los derechos chocan y se enfrenta; asimismo, todos los derechos, a prima facie, merecen protección, pero esta frase pone el acento en la vocal equivocada; en otras palabras, la pregunta es: ¿Cuál derecho es más importante? ¿Cuál derecho debemos preservar? Por ello, necesitamos realizar un esfuerzo por buscar la voz que merece la protección cuando colisionan nuestros derechos.

3.“No es la forma de protestar”. El argumento que, al parecer, presenta mayor potencia y que ha sido utilizado ampliamente en contra la protesta, consiste en sostener que, “no es la forma de protestar”; tal frase merece dos comentarios a contrapelo. En primer lugar, habrá que decir que no existe un listado o decálogo sobre “formas correctas de protestar”; más bien, la protesta es una medida desesperada cuando fallan los canales institucionales (Eduardo Miño es recuerdo doloroso recuerdo de este ejercicio). Sobre esto, Roberto Gargarella sostiene que la protesta tiene un valor especial en nuestras democracias imperfectas, calificandola como “el primer derecho” debido a que nos permiten mantener los demás derechos vivos.

Como segundo comentario, se observa que la frase en cuestión intenta esconder la razón del por qué se protesta, invalidando la demanda sustantiva por acciones no proporcionales o violentas. En razón a ello, podemos sostener que, la violencia en las protestas y el valor de esta son asuntos distintos, es decir, es posible criticar los hechos de violencia ocurridos en la protesta, pero tales eventos no merman, en ningún caso, la importancia y el valor de razón de la protesta. Son cuerdas distintas, las cuales deben tener un tratamiento diferente. Vale destacar, nadie sensatamente ni honestamente asimilaría el ejercicio de derecho a dañar injustificadamente a terceros y robos masivos.

Finalmente, una de las creaciones más importante de la humanidad son los derechos ¿Su mérito? nos permiten vencer demanda generales, argumentos que invocan el interés común y económicos. De lo contrario, son solos papeles guardados en biblioteca jurídicas.

Déjanos tus comentarios
La sección de comentarios está abierta a la reflexión y el intercambio de opiniones las cuales no representan precisamente la línea editorial del diario ElDesconcierto.cl.