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Rugbiers argentinos que asesinaron brutalmente a joven se tomaron una selfie sonriente a 20 minutos del crimen

Por: El Desconcierto | Publicado: 19.02.2020
Rugbiers argentinos que asesinaron brutalmente a joven se tomaron una selfie sonriente a 20 minutos del crimen |
«Ahí se puede ver la actitud que tomaron luego del crimen. Tenían tiempo para sacarse selfies (…) Esa es la imagen de los asesinos. Contentos, sacándose selfies. Es muy difícil excluir a los otros participantes», indicó el abogado querellante del caso sobre este nuevo antecedentes, que será presentado como prueba a la Fiscalía para acreditar el ánimo del crimen.

El pasado 18 de enero, un terrible crimen estremeció a Argentina, luego de que en Villa Gesell una decena de rugbiers golpearan hasta la muerte a Fernando Baéz Sosa de 18 años.

A un mes del asesinato, los acusados permanecen presos en la Cárcel de Dolores, mientras afuera avanza la investigación judicial. Se trata de Máximo Thomsen(20), Luciano Pertossi (18), Ayrton Viollaz (20), Matías Benicelli(20), Alejo Milanesi(20), Blas Cinalli (18) y Juan Pedro Guarino(19), Enzo Comelli (19),Ciro Pertossi (19) y Lucas Pertossi(20).

En este contexto, han ido apareciendo distintos nuevos antecedentes en el caso. Por ejemplo, tras la pericia de los celulares de los implicados, se encontró una fotografía que habría sido tomada 20 minutos después del asesinato.

Lo particular de esta imagen es que se trata de una selfie, donde los rugbiers aparecen sonrientes y en contexto de festejo, que habría sido hallada en el celular de Cinalli.

«Fundamentalmente lo que puedo aclararles es que es una selfie que se sacaron después de 20 minutos de la matanza. Y ahí se puede ver la actitud que tomaron luego del crimen. Tenían tiempo para sacarse selfies», señaló a Canal 13 (Argentina) el abogado del caso, Fernando Burlando.

El querellante señaló al medio que tienen registro de la hora en que fue tomada la foto y esta será un nueva prueba aportada a la Fiscalía para demostrar el «ánimo» del crimen.

Burlando indicó que la selfie fue tomada a las 5.11 de la mañana, cuando los agresores llegaban a lugar que arrendaban. «Esa es la imagen de los asesinos. Contentos, sacándose selfies. Es muy difícil excluir a los otros participantes», agregó el abogado.

Asimismo, esta reveladora fotografía muestra a un onceno sospechoso, identificado como «Pipo». «La fiscal tiene que investigar concretamente de quién se trata. La casa tenía 12 camas. Nosotros consideramos que el número 11 no es un testigo. Hay mucha información. Hablaban del asesinato en manada, pedían drogas… Es algo muy importante que acercaremos a la Fiscalía», sostuvo Burlando sobre los nuevos antecedentes.

La defensa de los acusados ya anunció que pedirán la nulidad de las declaraciones indagatorias y la ronda de reconocimientos, acusando que se realizaron mediante un proceso irregular, según detalló Página 12.

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