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Opinión

A 50 años de la Unidad Popular

Por: Emilio Daroch | Publicado: 02.09.2020
A 50 años de la Unidad Popular Bandera de la Unidad Popular hoy en La Moneda |
El Programa de la UP era consistente para realizar cambios profundos en la sociedad de Chile, el rol del Estado, la incorporación de la gran masa de los trabajadores, los pequeños empresarios, la gente de los sectores medios y, por qué no, sectores de la derecha no fascista. Era amplio, democrático, de participación, encabezado por un hombre íntegro, de respetada trayectoria, de años de lucha: el mejor.

A pocos de cumplirse 50 años del triunfo de Salvador Allende en las elecciones presidenciales, es bueno destacar que, si bien Allende obtiene el primer lugar, es sólo con un 36,63 % (un tercio de la votación), luego de una campaña del terror organizada por los sectores más reaccionarios de la derecha de nuestro país. Muchas mellas hicieron en el resultado final de estas elecciones.

Había triunfado el Programa de la Unidad Popular, que era consistente para realizar cambios profundos en la sociedad de Chile, el rol del Estado, la incorporación de la gran masa de los trabajadores, los pequeños empresarios, la gente de los sectores medios y, por qué no, sectores de la derecha no fascista. Era amplio, democrático, de participación, encabezado por un hombre íntegro, de respetada trayectoria, de años de lucha: el mejor.

Uno de los grandes ejes era la recuperación de las riquezas básicas para Chile y su pueblo, las primeras 40 Medidas, apuntaron a disminuir y, tal vez, eliminar las grandes diferencias sociales, la definición de salud para todos, educación gratuita y de calidad para todos, sin importar condición social y/o económica, el emblemático medio litro de leche diario para cada niño de este país, que aun en dictadura y democracia mantuvo su vigencia. Fueron, entre otros, los ejes centrales de lo que sería en gobierno de la Unidad Popular.

Para proclamar a Salvador Allende había que esperar la decisión del Congreso. En este y fuera de él, la derecha y el “imperialismo” norteamericano, encabezado por Nixon y Kissinger, hacían toda clase de maniobras para impedir que el nuevo gobierno entrara a La Moneda. Estas aseveraciones, no creídas en su momento, fueron desenmascaradas por la apertura de documentos secretos de la CIA, donde quedó de manifiesto el apoyo norteamericano a los sectores de derecha, incluida la Democracia Cristiana, que recibieron grandes recursos para realizar una campaña del terror y evitar la decisión de las urnas. Allende y la Unidad Popular habían encendido una luz de esperanza para que el pueblo organizado obtuviera una victoria significativa por mejorar sus condiciones de vida.

En ese momento, se desestimó la lucha armada para la conquista del poder, prefiriendo hacerlo a través de elecciones democráticas y participativas, con los grandes sectores postergados en la sociedad chilena. Por eso este proceso no debía avanzar, había que pararlo, y no se escatimaron esfuerzos ni recursos para ello. Así, es como el 25 de octubre de 1970 es asesinado el general René Schneider, comandante en jefe del Ejército chileno, quien había manifestado la opinión de que el Ejército respetaría la decisión del Congreso. El crimen fue llevado a cabo por un grupo de conspiradores liderados por Patria y Libertad. El objetivo estaba muy claro: había que impedir que Allende fuera proclamado Presidente.

Sabemos qué pasó el 11 de septiembre de 1973. El golpe militar, apoyado por civiles, aplastó la gran demanda social y provocó la dictadura más sangrienta en la historia de este país. De la unidad del pueblo depende que no se repita esta parte negra de la historia. La victoria de la Unidad Popular, sin duda, es una muestra de la capacidad de los partidos políticos de unirse en torno a un programa. Tuvo aciertos y desaciertos, pero que, pese a todo, marcó un hito importante en la lucha del pueblo chileno por alcanzar un gobierno que lo interpretara en sus grandes conquistas sociales.

Hoy, tenemos la obligación de mejorar el pasado, y forjar de una mejor manera la unidad política y social en torno a las demandas actuales de nuestro pueblo.

Emilio Daroch