Hace una semana, una decisión del gobierno de Brasil remeció a la comunidad internacional. Apenas días ante del inicio de la Conferencia Mundial del Cambio Climático (COP 24) que se realiza en Katowice, Polonia, el país renunció a la organización del evento para 2019. Esto en la línea que ha manifestado el ultraderechista Jair Bolsonaro, quien niega el cambio climática y, al más puro estilo de Donald Trump, no le da importancia al tema.
La polémica decisión del gobierno brasileño levantó inmediatamente las conversaciones. La organización para el evento más importante del cambio climático, que se realiza todos los años, le corresponde a América Latina e implica un gran despliegue de recursos y preparación. En la actual COP participan más de 28 mil personas de más de 190 países, desde jefes de Estado, ministros, observadores y medios de comunicación. Se estima que el costo que tiene un evento de estas características cuesta alrededor de 100 millones de dólares para el país organizador.
Sin Brasil, las miradas se fueron inmediatamente hacia Chile y Costa Rica como candidatos «naturales» para albergar el evento, a los que se sumó posteriormente Guatemala. El problema de los países de Centro América, según se comenta en Katowice, es que no contarían con la infraestructura suficiente para un evento de este tipo.
Los costos de la organización de la COP ya están en conocimiento de Presidencia y Cancillería, que en estos días están analizando si le dan el visto bueno a la realización del evento en Santiago. El alto costo de la organización sería el principal escollo, sobretodo porque Chile también organizará la edición 2019 de la APEC. La búsqueda de fondos internacionales está a su vez limitada al ser Chile un país de la OCDE, pero algunos países europeos como Alemania ya habrían manifestado su compromiso a aportar financieramente.
Los lugares que se manejan por ahora como eventuales sedes son el Espacio Riesco o el Parque O’Higgns.
La decisión se tomará en las próximas semanas y se estima que la presencia de la ministra de Carolina Schmidt en la actual edición de la COP será clave. La titular de Medio Ambiente llega el lunes a Polonia y se hará parte del último tramo de las negociaciones del encuentro.
Para Giovanni Calderón, director ejecutivo de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, quien es parte de la delegación chilena en Katowice, la organización de la COP del próximo años sería «un privilegio para Chile» y la «consolidación del país como uno con un modelo de desarrollo sustentable». «Esto costó que se instalara y sería bonito coronarlo con una COP y demostrarle al mundo que nos tomamos este tema en serio», afirmó.