Planeta vs. Plásticos: Este es el lema del Día de la Tierra 2024, que se conmemora cada 22 de abril recordando la fecha de una marcha ambiental masiva de estudiantes en 1970 en Estados Unidos.
Este año, países del mundo están negociando un tratado internacional para comprometer medidas que reduzcan de forma efectiva la cantidad de plástico que llega a los océanos y a los vertederos. La próxima ronda de negociaciones ocurrirá en Ottawa, Canadá a partir del 23 de abril.
En Chile, diputados y diputadas oficialistas crearon a mediados de abril la bancada “Basura Cero”, donde piden un rol determinante del Estado chileno en las negociaciones del tratado, para impulsar no solo medidas de reciclaje, sino de prohibir la producción de plásticos innecesarios o de un solo uso.
“Debe haber una meta global obligatoria de reducción de producción de plásticos. Esto es fundamental para que cualquier otra acción posterior sea realmente efectiva. La producción de plásticos crece exponencialmente año a año y es fundamental que Chile asuma un rol que sea de punta liderando a los gobiernos latinoamericanos para que las negociaciones avancen y terminemos con un tratado realmente efectivo”, comentó Alejandra Parra, de la Red por los Derechos Ambientales (RADA), durante el lanzamiento de la bancada Basura Cero.
A inicios de mes, Rapa Nui fue la sede de una cumbre de líderes de islas del Pacífico, cuyas costas se llenan cada día de plásticos y microplásticos generados en el continente. Allí, representantes de 20 territorios polinesios firmaron una declaración pidiendo ayuda para cesar la contaminación por plásticos y pidiendo ambición en las negociaciones del tratado.
Así, cada vez hay un mayor consenso sobre la insuficiencia de acciones como el reciclaje y reutilización o la limpieza de océanos y playas, si no se reduce drásticamente la cantidad de plásticos que el mundo produce y que ingresan al mercado, apuntando a cortar el problema desde la raíz.