Con Chile ya clasificado tras eliminar en penales a Portugal, la Copa Confederaciones esperaba a su segundo finalista. Se jugó en el Estadio Olímpico de Sochi y fue dirigido por el árbitro argentino Nestor Pitana.
A los 5′ el equipo alemán se puso en ventaja tras un disparo rasante de Leon Gortezka. Apenas un minuto después, el mismo Goretzka le ganó la marca a los zagueros mexicanos y dejó las cosas 2-0 en el amanecer del encuentro.
Tras el duro golpe inicial, México ha adelantado sus líneas y está en busca del descuento para seguir con chances de jugar la final. Y si bien ha tenido opciones para descontar, tanto Ter Stegen como la mala puntería le han jugado en contra al equipo de Juan Carlos Osorio.
En el complemento, los mexicanos siguieron taladrando para conseguir un tanto, pero a los 13′ Alemania volvió a ampliar las cifras, esta vez mediante el delantero Timo Werner. No obstante la debacle psicológica que esto implica, México vendió cara su derrota y continuó intentando.
Así, tras muchos oportunidades desperdiciadas, finalmente llegó el descuento con un golazo de Marco Fabián -hasta ahora el mejor del torneo-. Pero la inyección de ánimo duró muy poco, dos minutos después, en los 90′, Amin Younes selló el definitivo 4-1. Un marcador inmerecido para México, pero que da cuenta del poderío germano que, sin arrsar en la cancha, es capaz de marcar diferencias importantes
Alemania, entonces, será el rival de Chile en la final de la Confederaciones, la cual se jugará el domingo 2 de julio en el Estadio Krestovski en San Petersbrugo. México se medirá contra Portugal en el partido por el tercer lugar en el Otkrytie Arena de Moscú.