Luego de que se filtraran las fotografías que destaparon una supuesta relación entre el jugador paraguayo Bernardo Gabriel Caballero y Antonio González, presidente del club Rubio Ñu -de la tercera división-, el caso parece haber dado un vuelco.
Esto, porque el propio futbolista aseguró que el presidente del club filtró las imágenes «por despecho», cuestionando la versión de González, quien acusó que era víctima de una extorsión de parte del representante del jugador.
«Esta persona muy especial para mí, era mi pareja personal. Tenía todos los privilegios en el club, con vehículos que nunca pensó que tendría», reveló el dirigente en un confuso video.
Sin embargo, el mismo agente, quien además es la actual pareja del futbolista, denunció que el culpable de la filtración de las fotos era el propio timonel del club, quien no habría soportado el fin de la relación con el joven futbolista.
Más tarde, Caballero entregó su versión: «Él siempre me obligó y amenazó. Primero por lo de la foto y que nunca me iba a dar mi pase. No avaló que yo me vaya de ahí», contó a la Radio La Unión de Paraguay.
Además, el lateral -que jugaba con el 3 en su espalda- reveló que «sé que hubo otros jugadores que tuvieron relaciones con él. Era una cuestión normal». Por último, recalcó que el dirigente del club los condicionaba: «Nos decía iba a promocionar, que nos iba a vender a un club. Cosa que nunca hizo. Al contrario, él siempre truncaba todo eso».
El caso ha despertado polémica en Paraguay, luego de que Antonio González difundiera las fotos acusando el método extorsivo de un tercero para conseguir el pase del deportista. Finalmente, el propio deportista -quien decidió retirarse sin haber llegado a ser futbolista profesional- lo desmintió y acusó de haber filtrado las imágenes.