En una de las escenas más insólitas que ha entregado el fútbol está lo ocurrido en el estadio de Alianza Lima, donde decidieron cortar la luz cuando el juez decretó el final del partido donde perdieron el Superclásico ante Universitario, consagrando a sus archirrivales como campeones del balompié incaico.
Al momento en que el juez decretó el final y los jugadores se disponían a festejar en cancha, todas las luces del estadio se apagaron y no se volvieron a encender más, obligando a los jugadores a iluminarse con las luces de sus celulares.
Alianza Lima admitió que lo hizo deliberadamente, pero argumentó que lo hizo por motivos de seguridad y para «iniciar la rápida evacuación de las tribunas».
«La decisión de apagar las luces del campo de juego del Estadio Alejandro Villanueva, una vez concluida la final de la Liga 1, se tomó con el único fin de incentivar la rápida evacuación de las tribunas y así preservar la integridad y seguridad del público y de las delegaciones deportivas», indicó el club en un comunicado difundido en sus redes sociales.
Sin embargo, no resultó bien. La Fiscalía de Lima abrió una investigación «contra los que resulten responsables de los presuntos delitos de exposición de personas al peligro y disturbios en agravio de ciudadanos y agentes de la PNP, tras el final del clásico del fútbol», informó la institución en la red social X (antes Twitter).
La PNP señaló, por su parte, que «ante lo acontecido, dos equipos de la Dirección de Investigación Criminal vienen realizando las diligencias preliminares respecto a los hechos, a fin de establecer las responsabilidades de los posibles autores, en coordinación con el Ministerio Público».