El Banco Central (BC) publicó este miércoles su Informe de Estabilidad Financiera (IEF), correspondiente al primer semestre de 2021. El documento da cuenta de la existencia de un mejor panorama externo, lo que sumado al avance en el plan de vacunación, ha contribuido a mantener la estabilidad en el país.
Fue el presidente de la entidad, Mario Marcel, quien expuso los resultados del informe ante la Comisión de Hacienda del Senado. Según el documento “las condiciones financieras locales permanecen holgadas, con alta liquidez y bajas tasas de interés”.
Uno de los puntos que destaca el IEF es que produjo una reducción del endeudamiento de los hogares, el que se ubica ahora en un 50% del PIB al primer trimestre de este año.
Dicho fenómeno estaría relacionado con “la mayor liquidez producto de los retiros de ahorros previsionales y transferencias fiscales, junto a una menor oferta y demanda de crédito”. Esto se suma a la posibilidad que han tenido los hogares para reprogramar sus deudas de forma voluntaria, lo que ha permitido “disminuir los niveles de morosidad a mínimos históricos”.
Sin embargo, el organismo técnico sostiene que “el mercado laboral se ha recuperado solo parcialmente, evidenciando un rezago respecto de la actividad”.
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En otros aspectos relativos a la evolución del sistema financiero local, el BC destacó la ampliación de los beneficios estatales dirigido hacia las empresas, como el Fogape Reactiva. Mientras que en paralelo en propio Banco Central mantuvo su programa de facilidades para financiar a la banca.
Así, el informe sostiene que “las empresas han experimentado una recuperación en sus ventas, manteniendo bajo y estable su impago, precisamente producto del amplio despliegue de políticas de mitigación, un mejor escenario externo e interno y la adaptación de los agentes al contexto actual”.
Cabe destacar que el organismo sostiene que, si bien la reacción de nuestra economía ha evolucionado mejor de lo esperado, “este despliegue ha implicado un uso relevante de recursos, lo que ha reducido la capacidad para enfrentar eventos disruptivos en el futuro, con riesgos que están aún lejos de desaparecer”.
Escenario internacional
Sobre las condiciones financieras globales, el informe da cuenta que han “permanecido favorables y que la actividad mundial muestra señales de recuperación”.
“En EE.UU. fue aprobado un tercer plan de estímulo, para aliviar los efectos de la crisis sanitaria y se ha iniciado la discusión en torno a un cuantioso plan de inversiones en infraestructura y energías alternativas de mediano plazo”, ejemplifica. Aunque advierte que “la magnitud de las medidas en EE.UU. ha generado un debate sobre potenciales impactos sobre la inflación y las tasas de interés de largo plazo”.
Además, enfatiza en la posibilidad de rebrotes de la pandemia y una eventual resistencia de las nuevas variantes de COVID-19 a las vacunas administradas. “Si bien la incertidumbre acerca de la evolución de la economía se ha moderado, se mantiene aún en niveles elevados”, explica.
“En este contexto, de producirse una reversión súbita de las tasas de política monetaria en economías avanzadas, las condiciones financieras para emergentes podrían restringirse más allá de lo previsto”, anticipa el documento.