El viernes pasado Scotiabank informó a sus trabajadores que cerrará 22 sucursales y despedirá a cerca de 600 funcionarios para fortalecer su presencia en canales digitales.
La decisión se adoptó considerando los cambios en las prácticas de los usuarios que durante la pandemia han dado más espacios a los canales online.
“Para adaptar nuestro negocio a este nuevo contexto y entregar la experiencia que estos esperan, decidimos realizar un ajuste en nuestra operación (…) La decisión fue analizada cuidadosamente, siempre buscando preservar los empleos tanto como sea posible”, afirmó Scotiabank, de acuerdo a información del Diario Financiero.
El banco con sede central en Canadá aseguró que pondrá a disposición de sus trabajadores “planes de salida con condiciones preferenciales” y privilegiará la movilidad interna en los casos que sea posible.
Específicamente, aludieron a un aumento de los finiquitos y el pago de más cotizaciones en los casos de funcionarios que estén en edad de jubilación.
Las modificaciones anunciadas por Scotiabank están programadas en un plazo de seis meses.