Carolina Muñoz. |
«Es el único programa en nuestro país que está realmente comprometido con una formación para el ejercicio profesional de la musicoterapia en Chile. Por lo tanto, es un programa que habilita para el ejercicio de la disciplina en nuestro territorio», dice Muñoz, coordinadora del curso.
¿Cómo el contexto actual ha afectado los procesos de las Terapias de las Artes? ¿En qué consiste el Curso de Especialización de postítulo en Musicoterapia de la Universidad de Chile? Estas son algunas de las preguntas que abordamos junto a Carolina Muñoz, coordinadora del Curso de Especialización de Postítulo en Musicoterapia de la Universidad de Chile, a propósito del inicio de postulaciones 2021 de la Escuela de Postgrado de la Facultad de Artes de la misma Universidad.
“En términos muy generales, la musicoterapia consiste en la exploración y utilización de recursos sonoro-musicales que se ponen al servicio de la salud humana, entendiendo por salud no sólo la ausencia de enfermedad, sino que el compromiso de avanzar hacia un mayor grado de bienestar, tanto para los individuos como para sus entornos y comunidades de pertenencia”, dice Muñoz.
-¿Cómo se aplica?
-La musicoterapia posee un espectro muy amplio de posibilidades de aplicación, tanto individual como grupal y también cubre desde la promoción de la salud, la prevención y alcanza niveles de asistencia en tratamientos y acompañamientos en procesos de rehabilitación. También podemos decir que es aplicable en todo el ciclo vital desde necesidades que pueden emerger en fase de desarrollo prenatal, cubriendo todo el ciclo vital hasta el otro extremo, el acompañamiento, por ejemplo, en la tercera y cuarta edad, así como en cuidados paliativos y procesos de duelo.
-¿De qué manera el contexto actual ha rearticulado los procesos de las terapias de las artes?
-He pensado que, como muchas otras disciplinas, este contexto de pandemia impone a la musicoterapia nuevos e importantes desafíos. Por un lado, creo que habrá emergencia de nuevas necesidades. Por ejemplo, podemos elucubrar que un momento de postpandemia va a implicar un tiempo en que los individuos recobremos algún grado de confianza en estar juntos nuevamente, próximos y cercanos. Por otro lado, también esperamos que emerjan muchas enfermedades asociadas a la ansiedad, a la depresión por pérdidas de trabajo, pérdidas de seres queridos, pérdida de un mundo que entendíamos de cierta manera. Ahí creo que hay una gran oportunidad para las musicoterapias en Chile de poder instalar dispositivos que acompañen a los sujetos en las Escuelas, en las comunidades (…) Por otra parte, creo que la pandemia ha intensificado dificultades que ya tienen larga data en nuestro país, que tienen que ver con las injusticias, con la falta de reconocimiento hacia algunos segmentos de la población, como las infancias o la tercera edad, entre otros temas, que ahora van a ser ineludibles. Creo que allí la musicoterapia cuenta con fantásticos recursos, motivadores recursos, para movilizar a los sujetos a encontrar mayores espacios de bienestar en el futuro.
-¿En qué consiste el curso de especialización de postítulo en musicoterapia de la Universidad de Chile?
-Por el momento podemos decir que es el único programa en nuestro país que está realmente comprometido con una formación para el ejercicio profesional de la musicoterapia en Chile. Por lo tanto, es un programa que habilita para el ejercicio de la disciplina en nuestro territorio. También es importante decir que somos un programa que cuenta con 20 años de experiencia y poseemos una planta docente muy especializada y de alto nivel. Cada año, recibimos postulantes que provienen de diversas áreas. Principalmente son profesionales de la educación, de la salud, profesionales de las artes, de la música en particular, de las ciencias sociales, entre otros ámbitos. Todos llegan con el interés y con las ganas de explorar las posibilidades terapéuticas de la música. Por lo tanto, podemos decir que nuestro espacio formativo es abierto, diverso y justamente se nutre del intercambio multidisciplinar. Este diálogo se potencia en contextos de experiencias sonoro-musicales. Podemos decir que nuestro programa se imparte en horario vespertino, lo que lo hace accesible justamente a profesionales, con una malla curricular que se distribuye en tres semestres.
-¿Cuáles son las dimensiones formativas del postítulo en musicoterapia?
-El curso de especialización en terapias de arte, mención musicoterapia, se organiza en cuatro dimensiones formativas. La primera de ellas tiene que ver con una dimensión disciplinar desde la cual se imparte asignaturas sobre los fundamentos y conocimientos teórico-prácticos propios y profundos de la musicoterapia en particular. Por otro lado, tenemos un ámbito de asignaturas que tributan a la dimensión interdisciplinar donde desarrollamos líneas de nutritivo intercambio con otros ámbitos como la música y medicina, la psicología de las artes y la musicología. En tercer lugar, contamos con una la dimensión práctica donde los estudiantes desarrollan competencias y habilidades específicas e instrumentales para hacer música en musicoterapia. Finalmente le damos gran relevancia a una dimensión que denominamos experiencial, donde todos los y las estudiantes vivencian en sí mismos, autoconocimiento a través de la música. Consideramos que este ámbito formativo promueve un desempeño responsable y ético de nuestro quehacer. Por último, también es importante mencionar que nuestro programa cuenta con un semestre de prácticas profesionales supervisadas.
-¿Cuál es el sello de la Universidad de Chile en el postítulo en musicoterapia?
-Que el curso de especialización en terapias de arte mención musicoterapia forme parte de una Escuela de Postgrado como la de la Universidad de Chile y de la Facultad de Artes en particular, para nosotros es un privilegio y también una gran responsabilidad. Por un lado, para seguir avanzando particularmente en la instalación de nuestra profesión como un ámbito que tiene muchísimo que aportar desde las artes hacia la salud. Desde allí se desprenden tres aristas, que me parecen importantes de considerar. Por un lado, la construcción de la musicoterapia en y desde Latinoamérica. Por otro lado, el desarrollo de investigación que permita construir conocimiento sólido en torno a nuestros aportes y los beneficios que podemos brindar. Y, en tercer lugar, hay una misión que tiene que ver con el compromiso de un musicoterapeuta al servicio de las necesidades de nuestra sociedad, con una musicoterapia de calidad y al alcance de todos.
Más Información: http://www.artes.uchile.cl/postgrado
Cierre primer llamado: 9 de octubre de 2020.
Consultas: postulacionpostartes@uchile.cl
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