El 30 de enero de 2014, nueve directores y directoras de Amnistía Internacional en Europa entregarán la petición en Moscú, y cientos de miembros y simpatizantes de Amnistía Internacional organizarán acciones y entregarán peticiones en las embajadas de Rusia en sus países.
La entrega irá precedida de un creativo acto publicitario con una bailarina profesional en el centro de Moscú que simbolizará la supresión de la libertad de expresión en la Rusia actual. A continuación, el grupo de directores de Amnistía Internacional se dirigirá a las oficinas del presidente.
“El mensaje que envían a Putin tanto miembros de base y simpatizantes de Amnistía Internacional como líderes mundiales que observan los Juegos desde fuera es el mismo: que retire una serie de leyes que restringen los derechos a la libertad de expresión, asociación y reunión.
“Estas leyes suprimen la creatividad y el desarrollo de la sociedad civil y desvirtúan el papel legítimo de los activistas de derechos humanos en Rusia”, ha dicho Sergei Nikitin, director de la Oficina de Amnistía Internacional en Moscú.
“La libertad de expresión es fundamental para el funcionamiento de una sociedad sana. No se puede permitir que las autoridades rusas utilicen los Juegos Olímpicos de Sochi para maquillar su terrible historial de derechos humanos.”