Los femicidios siguen siendo parte de una triste realidad en el mundo. Y en América Latina, la inmensa mayoría permanece en impunidad. Así lo alertó la brasileña Luisa Carvalho, directora de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe: “El feminicidio y otras formas de violencia contra las mujeres en la región siguen en aumento y la aplicación de la justicia continúa siendo limitada, con 98 por ciento de impunidad”.
La Onu presentó el informe del estudio «Prevenir los conflictos, transformar la justicia, garantizar la paz», en el que se da cuenta que de los 25 países del mundo con tasas más altas de femicidios, 14 son de América Latina y el Caribe. Los dos países líderes son El Salvador -donde 14 de cada 100 mil mujeres son asesinadas por razones de género-, Honduras -11 de cada 100 mil- y Guatemala.
En estos tres países centroamericanos, «las pandillas intranquilizan a la población» y las mujeres y niñas «experimentan espeluznantes tasas de violencia letal y no letal». En el ránking están también Guatemala en el cuarto puesto, Bahamas en el quinto, Belice en el octavo, Venezuela en el noveno y Colombia en el décimo.
Casos llamativos del estudio es que el Guatemala el año pasado se abrió un juicio contra un destacamento militar que sometió a 15 mujeres indígenas a «esclavitud doméstica y sexual» durante el conflicto armado interno del país.