El Parlamento italiano inició este miércoles un debate sobre un controvertido proyecto de ley que obligaría a las empresas a garantizar tres días de licencia médica para las trabajadoras que sufren dolores menstruales.
La iniciativa fue presentada por cuatro mujeres del Partido Democrático, al que pertenece el actual primer ministro del país, Paolo Gentiloni, y encendió una discusión pública entre partidarios y detractores.
Mientras que los que están a favor sostienen que este permiso resolvería el ausentismo laboral de las mujeres con dolores muy intensos durante los primeros días del período, sus opositores consideran que esta legislación podría perjudicar el acceso laboral de las mujeres porque los empresarios tendrían una excusa para no contratarlas.
La medida ya existe en países como Japón, que fue el primero en instaurarla, y Corea del Sur, donde funciona desde 2001. En Gran Bretaña se está estudiando.
Las reglas muy fuertes, conocidas como dismenorrea, interfieren mucho en la vida cotidiana de las mujeres. Algunos expertos aseguran que los dolores pueden ser similares a los de una apendicitis. Se estima que el 90 por ciento de las mujeres sufren dolores menstruales a lo largo de su vida, pero sólo entre el 5 y el 10 por ciento de ellas padecen dolores suficientemente graves como para impedir la actividad, especialmente entre las jóvenes de 19 a 25 años.
Según el Washington Post, el 61 por ciento de las italianas están dentro del mundo laboral, una de las tasas más bajas de ocupación femenina en Europa, que se sitúa en el 72 por ciento.
Para acceder al beneficio no es suficiente con estar en edad fértil y ser mujer, sino que deberá ser acreditado por un médico que certifique la condición, lo que podrá renovarse cada año. El proyecto de ley 3.781, llamado «Establecimiento de la licencia para las mujeres que sufren de dismenorrea» lleva casi un año en el parlamento italiano.