En 1970, el dramaturgo argentino Raúl Damonte Botana, más conocido como «Copi», convirtió a Eva Perón en un personaje teatral que causó escándalo. De hecho, hasta estalló una bomba en el teatro parisino en donde se le representaba y tuvieron que actuar durante más de tres meses de funciones bajo la protección de la policía.
La polémica obra de Copi volverá a la carga en julio próximo, donde el actor chileno Benjamín Vicuña interpretará a Eva en el Teatro Nacional de Cervantes. En una lectura transgresora, iconoclasta y lúcida, la Eva Perón de Copi no es casualmente visibilizada a través de un hombre: más bien, es decididamente un personaje transexual.
Según consigna Infobae, el dramaturgo era nieto del fundador del diario Crítica y su familia tuvo que exiliarse en Montevideo durante el primer gobierno de Perón. Sin embargo, su montaje no es precisamente un panfleto antiperonista sino una lectura sobre el horror que representa el poder.
El personaje de Eva Perón pensado por Copi fue interpretado originalmente por un hombre a pedido del autor y es precisamente su transexualidad la que le permite, en la ficción, librarse del cáncer fulminante de útero que la aquejó a los 33 años, provocando su muerte temprana. Uno de sus rasgos más importantes es que la Evita trans logra opacar a Perón mismo, por lo que la propuesta que tendrá que encarnar el actor chileno no es sencilla y lo enfrentará a uno de sus más grandes desafíos interpretativos.
La obra tendrá una temporada breve de acción en Buenos Aires, para luego emprender una gira en Francia y España.