Lucas Azcona es el nombre del homicida confeso de Nicole Sessarego, la joven estudiante chilena que fue atacada mientras regresaba a su hogar en Buenos Aires.
Azcona fue condenado por la justicia argentina a cumplir cadena perpetua por el homicidio agravado y femicidio de la joven, luego de agredirla en la noche y terminar con su vida en julio de 2014.
Según explicó el agresor en conversación con Telefé, «en todo momento me he hecho cargo. Me hice cargo del homicidio que generé o produje por acumulación de ira que tuve anteriormente por cosas del trabajo, la vida durante muchos años. Eso generó mucha bronca, ira, todo dentro mío y a la vez exploté generando eso».
Consultado sobre si pudo ser cualquier mujer, Azcona fue enfático en asegurar que se trató de un crimen al azar: «Fue espontáneo (…) No aguanté ese día y exploté en esa manera que, a la vez, no fue algo que yo esperaba».
Por su parte, Shirley Bórquez, madre de Sessareggo, aseguró sentirse descolocada al ver «su frialdad, pero tampoco no me admira nada de él».
«Nunca esperé hacer lo que hice. Nunca me lo imaginé. Lo siento por ella y lo siento por mí, más por ella, joven. No lo puedo explicar. No tengo una respuesta de por qué maté a Nicole«, aseguró el homicida.
El cuerpo de la joven fue encontrado en el hall principal del edificio donde vivía, en el barrio de Almagro, con al menos 11 puñaladas.