A esta hora, la celebración de las mujeres se toma las calles de Argentina. Vivieron una noche de vigilia, expuestas al frío sin contemplaciones de estos días, que muchas siguieron desde sus casas o los alrededores el Congreso. Fueron años de lucha para legalizar y sacar de la clandestinidad la interrupción del embarazo, que esta vez parece avanzar de forma sólida hacia la despenalización.
Luego de más de 20 horas de debate y momentos de preocupación, debido a lo ajustada que se mantuvo la votación en la Cámara Baja, el proyecto obtuvo media sanción y avanzará hasta el Senado para convertirse en ley. En las calles, el último conteo de votos provocó lágrimas y gritos de festejos, las manos en alto con los emblemáticos pañuelos verde tiñendo toda la escena.
Con la emoción desbordada, las activistas históricas de la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito se abrazaron y se congregan a esta hora junto a cientos de personas en el centro de la ciudad porteña, junto a una enorme bandera de color verde.
«¡Aborto legal en el hospital!», celebraron las mujeres a gritos, sin desanimarse producto del cansancio de una noche entera de vigilia y el frío. La emoción no solo se expresó en Buenos Aires: en otras ciudades de Argentina, con los televisores encendidos en bares, cafés y hogares, las activistas siguieron cada detalle de la jornada y estuvieron atentas al conteo de voto, para romper en una celebración colectiva apenas se confirmó el avance del proyecto.
Gritos, abrazos y lienzos agitándose en lo alto, celebraciones efusivas que se extenderán durante toda la jornada y provocan, a su vez, festejos y mensajes de admiración y cariño desde diversos rincones de América Latina y el mundo.