El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha usado su número personal de WhatsApp para difundir un video que convoca a sus seguidores para el acto del próximo día 15 de marzo, el cual está siendo organizando por una docena de grupos de extrema derecha de su país.
La revelación de este hecho la hizo la periodista Vera Magalhães, del diario Estadão y ha sido difundida por diversos medios.
Bolsonaro também enviou esse ouro vídeo. A produção é mais tosca, mas o recado é o mesmo pic.twitter.com/WW9J5Xs1ee
— Vera Magalhães (@veramagalhaes) February 26, 2020
En el video, se observan palabras de orden como “basta” y “necesitamos cambiar a Brasil”, aunque sin referirse específicamente a las demandas. Sin embargo, si uno va a las redes sociales como Twitter y Facebook de las organizaciones de extrema derecha, como el Movimiento Brasil Conservador y el Movimiento Integralista, que están organizando esa jornada de protestas del 15 de marzo, verá que la pauta principal del evento apoyado por el mandatario es defender el cierre del Congreso Nacional de Brasil y el Supremo Tribunal Federal (STF), máximo órgano del Poder Judicial.
El texto del video usa el himno brasileño tocado en guitarra como música de fondo, mientras la voz dice que “él (Bolsonaro) fue llamado a luchar por nosotros, compró la pelea por nosotros, desafió a los poderosos por nosotros, casi murió por nosotros (casi llamando «Jesús» a Bolsonaro, y mostrando el video del cuchillazo que recibió durante la campaña de 2018), enfrenta a la izquierda sanguinaria y corrupta por nosotros, sufre calumnias y mentiras por hacer lo mejor para nosotros, él es nuestra única esperanza de días cada vez mejores, y necesita nuestro apoyo en las calles el día 15 de marzo”.
La convocatoria tiene claros tintes golpistas. Una de las fotos usadas trae una leyenda que dice “los generales aguardan las órdenes del pueblo” y las fotos de cuatro generales brasileños, algunos en retiro, que son parte del gobierno de Jair Bolsonaro, incluyendo al vicepresidente Hamilton Mourão.
Otra de ellas, además de exigir abiertamente que Bolsonaro cierre al Congreso y el STF, pide que impulse a un nuevo AI-5, recordando al Acto Institucional 5 de la última dictadura militar en Brasil, en el año 1968, que cerró el Congreso y creó los servicios represivos DOPS y DOI-CODI, similares brasileños a lo que fueron en Chile la DINA y el CNI.
Segundo el diario O Globo, la oposición, incluyendo sectores de izquierda y centro derecha, ha convocado una reunión de emergencia para este miércoles, para tratar del tema.