El discurso del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, cambió radicalmente en las últimas horas en relación a la pandemia del coronavirus. Este martes, el mandatario se dirigió a su pueblo a través de una cadena de radio y televisión en la que se hizo evidente el tono distinto al abordar el complejo tema.
Tanto así que apeló a un pacto nacional para enfrentar la pandemia. «Agradezco y reafirmo la importancia de la colaboración y la unificación necesaria de todo en un gran pacto para la preservación de la vida y el trabajo: parlamento, poder judicial, gobernadores, alcaldes y sociedad», dijo Bolsonaro, quien durante los últimos días había sido categórico en cuestionar la cuarentena que decretaron varios estados e incluso había salido a pasearse por las calles el fin de semana, generando varias aglomeraciones en la vía pública, incluso contraviniendo las instrucciones de su ministro de salud.
En esta oportunidad, la autoridad dijo que el país enfrenta un «gran enemigo». «Estamos enfrentando el mayor desafío de nuestra generación. Mi preocupación siempre ha sido salvar vidas«, dijo quien había aludido al virus como «una gripecita» y había alentado a la gente a salir a trabajar para no afectar tan dramáticamente la economía del país en el que cada vez se escuchan más voces disidentes a su gestión.
La oposición al mandatario latinoamericano se incrementa en el país donde ya se han escuchado mociones de destitución que apuntan a la cúpula de las Fuerzas Armadas, al tiempo que la gente se organiza y suma varios días de masivos cacerolazos en su contra.
Respecto de las cifras de la pandemia en este país, los números son alarmantes. Tanto así que solo este martes se reportaron 24 decesos, los que en total ascendían a 201, con un preocupante incremento de víctimas del 27%.