Gustavo Petro: “Nos vamos a parecer a Chile en su esfuerzo de construcción democrática”

El próximo 7 de agosto Gustavo Petro asumirá como Presidente de Colombia. Será el primer mandatario de izquierdas en la historia de ese país, lo que ha puesto el foco de mundo en el desafío que emprenderá este economista de 62 años.

“Si fracaso, las tinieblas arrasarán con todo”, confiesa el presidente electo de Colombia en El País de España, en su primera entrevista a un medio internacional, en un diálogo donde habla de los peligros que enfrenta su Gobierno y las claves de sus planes con la narcoguerrilla, los militares y la subida de impuestos a los más ricos, entre otros.

“Las reformas se hacen el primer año o no se hacen”, advierte sobre sus planes que incluyen una reforma tributaria y un gobierno paritario. Y ante la pregunta sobre qué le gustaría que dijeran de él cuando acabe el mandato responde: “Tenemos tres objetivos: paz, justicia social y justicia ambiental. Si al final de mandato he avanzado en las tres, chévere. Será el mejor Gobierno de la historia”, dice.

En la extensa conversación, Petro también se refiere a Chile, y su proceso de transición. “Mi Gobierno tiene que generar comienzos, porque son temas a largo plazo. Yo lo llamo el Gobierno de las transiciones. Se inicia una era y esperamos que se mantenga. Eso dependerá de la sociedad colombiana, de sus votaciones, de si quiere retroceder de nuevo o avanzar. En eso nos vamos a parecer a Chile, en su esfuerzo de construcción democrática”, revela.

“España también es un ejemplo: salió de una era fascista a una democrática. Y ha sido un proceso continuo. Es la sociedad la que da pasos adelante y, al final, la idea democrática se torna irreversible. Eso mismo va a suceder aquí”, complementa.

Consultado qué va a hacer en concreto para superar la fractura que atraviesa a Colombia, Petro comenta que “he convocado un gran acuerdo nacional para tratar de construir un clima político diferente. Charlaré con Álvaro Uribe y con Rodolfo Hernández. Es el momento de hacer reformas, no de dejar las cosas como están. Hay que evitar la confrontación sectaria y abrir un diálogo civilizado. Y también hay que buscar la paz. El clima político puede incentivar o amortiguar la violencia. Uno de mis propósitos es alcanzar el máximo de paz posible en Colombia”.

Eje progresista

El triunfo de Petro es considerado como una señal de la conformación de un nuevo eje progresista en América Latina, que incluye posiblemente a Brasil si en las elecciones de octubre se impone Luiz Inácio Lula da Silva.

El mandatario electo tiene una clara sintonía con Gabriel Boric. De hecho, asistió a su asunción del mando en marzo pasado y una vez consumado su triunfo en el balotaje, el mandatario chileno lo saludó con un mensaje “¡Alegría para América Latina!”.

De acuerdo a Petro, es claro que se debe superar la primera etapa del progresismo en la región “basada en los combustibles fósiles, que podríamos llamar la fase de Chávez”.  A su juicio la tarea hoy es “plantearse un nuevo modelo de desarrollo en América Latina, esa es nuestra función en la agenda, nuestro legado. Y ese va a ser el tema de discusión en ese eje”.