Durante las últimas horas, autoridades y organizaciones medioambientales de Quintero y Puchuncaví hicieron entrega a la ministra del Interior, Izkia Siches, de un petitorio para abordar los episodios de contaminación que enfrenta la zona, que esta semana que concluye se repitieron lunes y miércoles, lo que redundó en masivas intoxicaciones que derivaron en la suspensión de clases.
Entre las solicitudes que hicieron al Ejecutivo, y de acuerdo a lo que publica Biobío, destaca la instalación de una nueva red de monitoreo que considere una medición de compuestos químicos, lo que actualmente no se hace, además del ingreso al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de todas las empresas del cordón industrial.
Respecto del encuentro, el alcalde de Puchuncaví, Marcos Morales, sostuvo en Cooperativa que espera que su comuna sea «el punto de partida» del cambio a la protección medioambiental para Chile.
Y específicamente sobre la reunión que junto al alcalde de Quintero, Rubén Gutiérrez tuvieron con Siches, a quien le plantearon que las dos comunas que representan necesitan ayuda urgente, esto es medidas inmediatas para enfrentar esta contingencia de larga data que las afecta, Morales comentó que le solicitó a la secretaria de Estado un delegado presidencial en Puchuncaví, como una medida a corto plazo. Y paralelamente, que se haga un cambio de normativas «con urgencia».
En relación al retorno a clases, la ministra les responderá sobre la forma en que se pueda implementar, aunque la idea es que si estas se retoman «es para nunca más suspenderlas», ya que la situación involucra a 14 colegios solo en Puchuncaví, lo que genera «un efecto dominó» sobre los estudiantes y sus padres y/o apoderados.
De hecho, Morales detalló que cuando se genera una emergencia, ellos deben resolver en ese momento cómo resguardar a los menores de edad, incluso arriesgando su trabajo y afectando el desarrollo comunal.