Plebiscito en Freirina |
“Estuve en tres comunidades donde sus pozos quedaron completamente secos, a esa gente la vi motivada votando el domingo principalmente porque quieren un cambio y hacer una demostración a la clase política”, comenta una dirigenta de Petorca sobre el alto porcentaje de votantes de las “zonas de sacrificio” que decidieron aprobar un cambio a la Constitución heredada de la dictadura.
El “Apruebo” arrasó en el país consagrando el camino hacia la nueva Constitución y particularmente lo hizo en comunas que tienen un denominador común: las «zonas de sacrificio». La comuna de Freirina, en la región de Atacama, se impuso con un 91,77%; Petorca con un 90,5%; en Huasco con un 90,41%; en Tocopilla con 90%; Mejillones un 89,56%; Cabildo con un 87,84%; Puchuncaví un 84,07% y Quintero, 81,33%. Territorios sometidos de manera histórica a la acción contaminante de complejos industriales que han provocado graves efectos en la salud de las personas.
Así lo reconoce Andrea Cisternas, residente de Freirina e integrante del Movimiento socioambiental Valle del Huasco, quien ve en los resultados una respuesta de la comunidad a los violentos episodios que han enfrentado desde la instalación de la empresa Agrosuper. También, cree que es una señal potente de la comunidad al posicionarse como protagonistas en la toma de decisiones respecto al territorio, algo de lo que se han sentido excluidos.
“Es una respuesta directa al modelo extractivista que respalda la actual Constitución, un modelo inhumano, que no da para más, que pisotea a los pueblos. Nosotros tenemos un trabajo de cinco años en asambleas, eso implica que las personas organizadas tienen poder de información para exigir justicia social y ambiental”, explica.
Freirina
Los problemas con Agrosuper han persistido en el territorio, incluso, cuenta Andrea, los vecinos y vecinas que viven en los cerros constantemente se han visto enfrascados en disputas por sus títulos de vivienda. También en sectores rurales la empresa ha cercado algunos lotes de terreno y eso ha provocado conflictos con el ganado. “Han muertos muchos animales que se van a esos lugares, destruyeron una gran parte del desierto florido, sectores donde no florece nada, donde hay especies en peligro de extinción”, detalla.
Jornada de votación en Freirina.
Petorca fue otra de las comunas donde la mayoría de los votantes estuvo por cambiar la Constitución heredada de la dictadura, y, a la vez, una de las zonas más golpeadas por la escasez hídrica por acción de la agroindustria, dedicada, en gran parte, al cultivo de paltos.
Lorena Donaire, vocera de las mujeres de Modatima, ha hecho un fuerte trabajo en el territorio, entregando estos últimos meses bidones de agua a familias que se vieron afectadas durante la pandemia por la falta de abastecimiento de camiones aljibes. Es por eso que estuvo tomándole el pulso a la organización previa al plebiscito y, aunque, reconocía una sensación de hartazgo con los procesos eleccionarios, finalmente la opción por el Apruebo se impuso. Cree que es una nueva oportunidad que se está dando la comunidad para empoderarse de las decisiones que se tomen en el territorio.
Foto: Municipalidad de Petorca.
“Estuve en tres comunidades donde sus pozos quedaron completamente secos, a esa gente la vi motivada votando el domingo principalmente porque quieren un cambio y hacer una demostración a la clase política. La gente ahora quiere empezar a pensar en los constituyentes, que tiene que ser del territorio, que entienda las carencias que tenemos”, sostiene.
Como integrante de una comunidad sacrificada ambientalmente, dice que es fundamental que la nueva Constitución establezca los derechos ambientales como un derecho humano y que se dote de contenido ecológico de acuerdo a las experiencias de las personas que viven en esos territorios. “Quienes trabajamos en esto vemos en esta votación la conciencia que han tomado los territorios, de ese cansancio y desesperanza que se ve en su rostro y en sus esfuerzos. Muchos han tenido que migrar por lo difícil que viven en sus territorios, muchos otros han resistido. Muchos se han empobrecido y no se pueden trasladar tampoco”, explica Lorena.
Luego de conocer los resultados del plebiscito en Petorca.
Mejillones, la lucha por el borde costero
La situación en Mejillones tiene el mismo relato de daño ambiental y lucha por mejorar la calidad de vida de sus habitantes. En este territorio se concentran termoeléctricas, plantas químicas y cementeras que han contaminado el entorno de las y los ciudadanos.
Horacio Fredes Elizondo integra el colectivo “Despierta Mejillones”, es también presidente de la Asociación de Turismo de Mejillones y, en esta oportunidad, fue vocal de mesa. Especialmente notó una gran cantidad de votantes jóvenes, algo que atribuye a las reivindicaciones por derechos territoriales y ambientales de las nuevas generaciones. “Hay presencia de casi 33 empresas donde cada una es un riesgo particular y en este momento no hay un plan de emergencia que sea asumido por estas empresas. Hay un flagelo de salud de aire, tierra y mar, pero también hay un tema de seguridad al hablar de los riesgos por los procesos de cada empresa”, explica.
Borde costero en Mejillones.
Uno de los factores preponderantes que, en su opinión, marcaron la participación de esta elección es la falta de legitimidad que han tenido las consultas ciudadanas de la actual normativa ambiental, en las que se han detectado irregularidades o falta de representación de las propias comunidades. “Muchos proyectos ya han estado ‘cocinados’ y la llamada participación ciudadana es solo para cumplir”, enfatiza. Es por eso que, sumado al cambio constitucional que busca establecer derechos de fondo, ve necesario fortalecer la Resoluciones de Calificación Ambiental (RCA) presentes en la normativa ambiental actual.
También reconoce que la movilización a las urnas de este domingo tiene relación con la capacidad de ejercer los derechos que se han ido discutiendo constantemente en las asambleas territoriales, donde han estado presentes como problemáticas que afectan el cotidiano de las personas como la emanación de gases tóxicos, la contaminación del mar y de la flora y fauna.
Foto cedida por Mejillones TV. Escuela María Angelica Elizondo.
Foto cedida por Mejillones TV. Celebraciones en la Plaza de Mejillones posterior a los resultados del plebiscito.
Valentina Inostroza, psicóloga comunitaria de la ONG Defensoría Ambiental, atribuye esta alta votación por el Apruebo a la injusticia ambiental que se vive en estos territorios. «Así lo han demostrado las organizaciones, lo que ocurre en sus territorios lamentablemente está dentro de la legalidad y dentro de un marco normativo vigente. Entonces, entienden que estos problemas va más allá de ir a tribunales todo el tiempo sino que en una visión de país que queremos y eso está plasmado en la Constitución, donde ven un cambio posible más allá de cambios en pequeñas leyes o normativas que también se pueden hacer», explica.
Cristina Lux, abogada de la misma ONG, en tanto, explica que la Constitución regula el marco institucional del país, aunque no sectorialmente. Lo esencial es que en el catálogo de derechos que incluya la nueva Carta Fundamental no posicione el derecho de propiedad privada por sobre otros derechos como el de vivir en un medioambiente libre de contaminación.
Y añade que la Constitución debe «revalorizar el derecho a vivir en un medioambiente libre de contaminación, a la salud, a la vida y, luego otros, como el de la integridad psíquica y física de manera que no estén subyugados«.
