Este 18 de septiembre, el Presidente Sebastián Piñera inició sus actividades oficiales de Fiestas Patrias, llegando al Servicio de Acción de Gracias de las iglesias evangélicas y protestantes o Te Deum.
El mandatario junto a las principales autoridades del país, como la presidenta del Senado, Ximena Rincón, ministros de Estado, comandantes en Jefe de las FF.AA. y el candidato presidencial de extrema derecha, José Antonio Kast, se trasladaron hasta el Centro Cristiano Internacional en la comuna de San Joaquín.
En dicho recinto, el sermón central estuvo a cargo del obispo Héctor Cancino, quien tuvo un confrontacional discurso, rechazando enérgicamente el matrimonio igualitario y defendiendo concepto de familia de la Constitución de 1980, la cual se fraguó en plena dictadura militar.
“Pedimos un fortalecimiento del matrimonio entre un hombre y una mujer y la familia, equidad y justicia sin discriminación y el derecho a la vida como unidad base de la sociedad chilena, valores que han regido a nuestra sociedad aún antes de los albores de nuestra república”, comenzó el líder religioso.
“La iglesia evangélica respeta de manera absoluta a las minorías, pero decididamente no acepta la imposición de ideologías y modelos de vida de estas minorías que se contraponen con nuestros derechos ciudadanos que se contraponen con nuestros derechos ciudadanos de sostener un estilo de vida conforme a los principios cristianos”, añadió.
Cancino cerró diciendo que “creemos que la familia es el núcleo fundamental de la sociedad como lo registra la Constitución de 1980”.