En la mañana de este domingo hicieron uso de su salida dominical a dos de los condenados por el homicidio de Werner Luchsinger y Vivianne Mackay, crimen ocurrido en 2013 en Vilcún.
El pasado jueves, Gendarmería informó que había otorgado la salida dominical y el beneficio de salida trimestral a los primos José Tralcal Coche y Luis Tralcal Quidel.
Los dos involucrados mantenían una huelga de hambre líquida que habían comenzado a principios de este mes, medida de presión que finalizó una vez que se otorgaron los beneficios.
A las 7.00 horas de esta mañana salieron del recinto penitenciario, donde los esperaba un vehículo. Su regreso al centro deberá ser a las 22.00 horas. Ninguno de los dos dio declaraciones al momento de la salida.
Críticas de la oposición y defensa de su abogada
Cuando se hizo público el otorgamiento de las salidas, desde la oposición cuestionaron la decisión. El diputado y secretario general de Renovación Nacional, Diego Schalper, anunció que oficiará a la ministra de Justicia, Marcela Ríos, y a Gendarmería.
«La decisión de Gendarmería no es puramente técnica, sino que responde a políticas que vienen dadas desde el Ministerio de Justicia, quien a su vez depende del Presidente de la República«, afirmó Schalper a pesar de que la misma institución precisó que fue el Consejo Técnico de Gendarmería quien autorizó los beneficios, los que se ajustaron a «la normativa vigente y el reglamento penitenciario».
La abogada Karina Riquelme, defensora de José Tralcal, explicó las razones que habían llevado a la huelga de hambre de los condenados. Sostuvo que la medida de presión «solo fue realizada después de numerosas solicitudes judiciales y administrativas. Y en particular frente a las ilegalidades de parte de gendarmería».
Riquelme detalló que «se solicita salida trimestral según Art 83 del reglamento 943. Y salida dominical. Ambas con requisitos cumplidos con fecha agosto y octubre. No siendo respondidas de ninguna manera«. Tras esto, según explicó, se realizó una presentación ante el Juzgado de Garantía de Temuco, para que exigir una respuesta a la solicitud y para que se aplique el Convenio 169 en las evaluaciones psicosociales.
El juzgado habría reconocido la falta de profesionales en Gendarmería con capacitación que comprenda la cultura mapuche y ordenó que «deben ser profesionales peritos que incluso comprendan mapudungun básico«, explicó Riquelme.
«Luego de la orden de parte del JG Temuco, hasta el 2 de marzo no se realizó respuesta y ya llevaban 6 meses en espera de parte de los condenados. Y por eso autónomamente y en una desicion extrema los condenados y su familia deciden protestar a través de una huelga de hambre», relató la defensora.