Irací Hassler, alcaldesa de Santiago, se refirió a la polémica por la multa que recibió un locatario del Barrio Lastarria, luego de borrar un grafiti que desconocidos habían hecho en las murallas de su pub.
Esto, tras la carta que el afectado, José Ignacio Aravena, envió a un matutino de la capital, acusando a la Municipalidad de Santiago de realizar esta acción.
Sobre esto, la jefa comunal expresó que “destacamos el esfuerzo que hemos hecho como municipio, en conjunto con vecinos y locatarios, para trabajar en la recuperación de las fachadas. Necesitamos rescatar Santiago y eso implica destacar su patrimonio”.
Explicando lo sucedido con el locatario, Hassler dijo que “este sector se encuentra en una zona típica y cuenta con una protección especial a propósito de su valor patrimonial y eso implica el cumplimento de una serie de normativas. Empatizamos con el locatario, ninguna mano sobra, pero es relevante hacer el cumplimiento normativo”.
Además, la alcaldesa aclaró que el local aún no cuenta con los permisos necesarios, pues “los últimos documentos que ha puesto en disposición este local para ser sujeto de permiso, fueron entregados el día de ayer lunes y eso se está tramitando en el municipio”.
De todos modos, tras este caso, Hassler subrayó que “hemos visto, además, la necesidad de revisión de distintas normativas que vienen de administraciones anteriores, pero que también tienen que ver con la definición que hace el Juzgado de Policía Local”, evidenciando que fueron ellos los que cursaron la multa.
“Vamos a estar apoyando a este y otros locatarios, porque insisto, ninguna mano sobra”, cerró.
Al respecto, incluso, el gobernador Claudio Orrego pidió «sentido común».