Luego que Renovación Nacional y el Partido Republicano iniciaran procesos para presentar acusaciones constitucionales contra ministros e, incluso, contra el Presidente Gabriel Boric, desde la UDI se desmarcaron de esto.
Fue el mismo presidente gremialista, Javier Macaya, quien dejó en claro que “no me gusta el festival de acusaciones constitucionales y la polarización en el Congreso”.
“La oposición tiene formas constructivas de ejercer su labor, es algo a lo que he apelado en el último tiempo y espero que se pueda imponer, con fórmulas de diálogo”, añadió a Cooperativa.
De todos modos, fue crítico con la acción de Boric de otorgar un indulto presidencial al exfrentista Jorge Mateluna y con las declaraciones posteriores.
«Son una decisión grave y un error político. Es una falta de coherencia que se den mientras la ministra del Interior Carolina Tohá convocaba a los partidos a un acuerdo de seguridad y los chilenos exigen tolerancia cero a la delincuencia y la violencia», advirtió.
“Si se hubiese generado algo similar por parte del Gobierno anterior, la respuesta estuvo, porque hubo 14 acusaciones constitucionales, dos contra el Presidente”, cerró Macaya.