¿Cómo coexisten la alta adhesión republicana y el creciente rechazo a la propuesta constitucional?

Durante las últimas semanas, distintos sondeos de opinión pública, caso de la Encuesta del Observatorio VAr Constitucional de la Universidad Diego Portales (UDP), además de Data Influye, han evidenciado tendencias que parecen contraponerse. Específicamente, estas apuntan a un incremento al rechazo a la propuesta de Constitución que se plebiscita en diciembre, proceso liderado por el Partido Republicano (PR), que al menos de manera aparentemente paradojal, aparace como el que concita la mayor adhesión ciudadana, en desmedro del resto de las formaciones políticas.

A este fenómeno se adiciona lo bien posicionado que se encuentra el referente de la ultraderecha, José Antonio Kast, cuyas aspiraciones presidenciales sólo parecen amagadas por la arremetida del emblemático rostro de la UDI, Evelyn Matthei.

Cómo coexisten estas posturas en medio de un álgido devenir político, donde además impera el distanciamiento ciudadano hacia los partidos, es lo que analizan expertos de la Universidad Diego Portales (UDP).

Gonzalo Espinoza, académico de la Escuela de Ciencia Política de esta entidad académica, e investigador del Núcleo MEPOP, considera que el incremento del rechazo a la propuesta de Carta Magna, es una tendencia que «se puede producir por la desafección que tienen los ciudadanos hacia el proceso constituyente y la política en general».

Data Influye

El rechazo se nutre de distintos sectores

«Esto no es algo sorpresivo, si consideramos la alta abstención que hubo en la elección de consejeros», plantea poniendo otra variable de análisis sobre la mesa.

Para Claudio Fuentes, docente de la Escuela de Ciencia Política de la misma casa de estudios, «lo que explica el aumento del voto en contra es que se nutre de diferentes sectores. Por un lado, una parte del votante de derecha siempre ha preferido el texto vigente y no quiere cambiar la actual Constitución».

Paralelamente, apunta a un fenómeno reciente. «El mes pasado aumentó el voto en contra de electores que son de izquierda, por las enmiendas republicanas, aquello es lo que explica este aumento», comenta aludiendo a la intervención de la ultraderecha, que suma la mayor cantidad de consejeros del proceso, como lo relevó la propia expresidente Michelle Bachelet hace unos días en una entrevista a Canal 13, donde sinceró que en diciembre podría votar contra el texto resultante de este nuevo intento por dotar al país de una nueva Constitución.

Republicanos lideran adhesión a partidos

Y en el ámbito de los partidos, consultado respecto del resultado de Data Influye, que certifica un liderazgo Republicano, con una adhesión del 15%, y del sondeo de la UDP, que le otorga un 22% a este sector, además de los factores que podrían explicar este fenómeno asumiendo el momento que atraviesa nuestro país, Espinoza asegura que «después del estallido social», estos «se han ido reordenando en torno a sus posiciones respecto a las diferentes políticas, lo que hace que los ciudadanos vuelvan a tener un lugar con el cual identificarse».

«En este proceso, se han visto favorecidos los partidos que tienen posiciones más duras, en este caso el oficialista FA y el Partido Republicano, que ha condensado parte del voto duro de la UDI», agrega.

Cómo se explica la ambivalencia del liderazgo del partido de Kast, que coexiste con un creciente rechazo al proceso constituyente, donde se impone justamente el Partido Republicano, es otra inquietud a la que el académico responde haciendo una aclaración.

«Una cosa es que Kast sea líder en las encuestas, pero otra cosa diferente es que sea querido. Kast y las figuras del Partido Republicano tienen un alto rechazo. Si bien mucha gente los quiere y se identifica con ellos, hay muchas más personas que tienen visiones más bien negativas sobre sus figuras y posturas», recalca.

Mirando los últimos sondeos, Fuentes plantea que «el liderazgo de Kast ha venido bajando», lo que vincula «a que existe una asociación entre Kast y el partido Republicano que es directa. Y como el PR comenzó a actuar más en política con sus enmiendas, Kast comenzó a bajar en las encuestas».

Por último, cuando le consultamos a ambos ¿qué significa para nuestra democracia que más del 40% no se sienta identificado con partido alguno?, como recoge la muestra de la UDP, Espinoza comenta que «esto es algo (que) la democracia chilena lleva bastante tiempo enfrentando».

«El 41% de no identificados con partido, incluso es más bajo que otros años, donde la desidentificación partidaria rozaba el 80%. Es deseable que más ciudadanos se identifiquen con partidos, ya que las democracias liberales son más estables y capaces de encauzar las demandas sociales con un sistema de partidos fuerte», agrega.

«Republicanos captura el voto de protesta»

Para Fuentes «el partido más grande en Chile es el que no se identifica con nada, pero efectivamente Republicanos tiene el más alto apoyo y eso se explica porque emergió como un partido contestatario respecto del establishment actual. Republicanos captura el voto de protesta, de enojo por no resolver los problemas cotidianos de la gente».

Y en su análisis respecto de este fenómeno, asegura que «la no identificación con partidos en general ha tendido a crecer y es reflejo del cansancio de la ciudadanía con partidos que no cumplen con sus promesas (no resuelven temas como salud, pensiones, educación de calidad, seguridad), que transversalmente tienen acusaciones de corrupción, y que son percibidos como que abusan de poder»,

«Se ha producido un distanciamiento en la medida en que los partidos están más vinculados a la gestión del Estado (municipios, reparticiones públicas) y menos al trabajo territorial con las comunidades», concluye.