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Izkia Siches apura al gobierno ante la segunda ola de contagios: «Estamos bien distantes de los indicadores que necesitaríamos para tener éxito»

Por: Carlos Jara | Publicado: 15.12.2020
Izkia Siches apura al gobierno ante la segunda ola de contagios: «Estamos bien distantes de los indicadores que necesitaríamos para tener éxito» Izkia Siches | Foto: Agencia Uno
Luego de ser reelecta como presidenta del Colegio Médico, Izkia Siches (34), sigue posicionándose como una de las figuras públicas más importantes de este agitado 2020. En entrevista con El Desconcierto, la dirigenta gremial habló de la preocupante situación actual de contagios y de las medidas que urgentemente se deben tomar para intentar frenarlos, pero también, reflexionó sobre el mediático rol que ha asumido este último año, sobre una potencial candidatura presidencial, y sobre su embarazo de 6 meses.

Sin duda, una de las figuras públicas que mayor protagonismo adquirió durante este año, fue la presidenta del Colmed, Izkia Siches. Desde que comenzó la pandemia, la médica irrumpió en el escenario político y social, constituyéndose como una de las figuras públicas de mayor proyección, en un Chile que en los últimos años se ha caracterizado por la ausencia de liderazgos nuevos. 

Y cuando quedan apenas dos semanas para que se acabe un 2020 en el que pasó de ser la presidenta de un gremio relativamente desconocido a ser una de las personas más influyentes y con mayor apoyo ciudadano del país, la recientemente reelecta presidenta del Colegio Médico en entrevista con El Desconcierto se refirió al complejo momento actual, con la segunda ola de contagios ya cobrando fuerza, y a cómo ha sido para ella afrontar este nuevo rol tan protagónico y mediático, que la ha llevado a recibir amenazas y a ser incluso candidateada como presidenta del país en más de una ocasión. 

«Se necesita un Estado fuerte que apoye a las familias en momentos como estos», sostuvo Siches en conversación con nuestro medio, enfatizando que además de las medidas económicas, se deben tomar medidas apresuradas para mejorar las estrategias de trazabilidad, testeo y aislamiento del virus.

– ¿Cómo ves el panorama actual, con prácticamente 2 mil casos diarios nuevamente?

Estamos muy expectantes, hemos estado conversando con los equipos que están realizando algunos modelamientos y efectivamente el aumento, si sigue la misma curva proyectiva, que ha sido lenta pero que sigue en ascenso, plantea un escenario bien preocupante para finales de diciembre e inicios de enero, donde podríamos tener un aumento significativo de los casos. Es por eso hemos respaldado las medidas que ha tomado el gobierno, con acciones como retroceder de fase.

– La población ya comienza a rumorear que vuelven las cuarentenas. ¿Qué medidas se pueden tomar hoy para evitarlas?

Hoy, full trazabilidad. Sé que ahora hay una encargada de trazabilidad en el Ministerio de Salud. Y hay que duplicar los recursos para esta materia. Mejorar en todos los indicadores y cambiarlos, porque son indicadores muy laxos que no permiten contener la enfermedad. En esa línea también hay que tener una estrategia de diagnóstico poblacional, que sea distinta a la de las PCR, que ojalá tengamos mucha mayor afectación, y que obviamente no requiera el hisopado, como son los test de antígenos, o RT Lang. Cualquiera de los dos, que ojalá se puedan aplicar de forma sucesiva en los empleos, en las faenas, en la población general para pesquisa poblacional a grandes rasgos. Y en materia de aislamiento, lograr hacer el diagnóstico epidemiológico efectivo. Cuando esté todo eso montado, evidentemente también vamos a tener que estar modificando aperturas y cierres según el aumento de los casos, pero todavía estamos bien distantes de los indicadores que necesitaríamos para poder tener éxito en esta segunda ola.

– ¿Y sientes que estas medidas se estén tomando o que se vayan a tomar en el futuro cercano?

Se están tomando pero con una latencia y demora preocupante. Creo que se está mejorando, van en la línea, pero esto (la estrategia de trazabilidad implementada) lo necesitábamos en abril, en mayo. Todavía no logramos implementarla, supimos que bajo la administración del ministro Mañalich esto fue algo muy frágil, muy débil. Partió con la administración del ministro Paris, fue después de mucho reiterar ese mensaje, pero sin duda queda demasiado por mejorar.

– ¿Cómo evalúas el desempeño del gobierno en este primer año de pandemia?

Ha tenido aciertos y desaciertos, sin duda. Sobre todo en la fase inicial, ya sea con la falta de transparencia, la poca participación y apertura a otras instancias como también la debilidad en una de las estrategias más fundamentales, que era la estrategia de testeo, trazabilidad y aislamiento desde los territorios, desde la atención primaria. Creo que hay cosas que se han ido corrigiendo en el camino, pero todavía queda mucho por delante. Como también empezar a tener capacidad de pesquisa, ojalá con algún test rápido o alguna forma mucho más expedita que la vigente, que nos permita tener mayor control. Lamentablemente creo que hoy estamos en un escenario bastante similar al que vivimos a mediados de año. 

– ¿Qué te pareció lo que ocurrió en La Araucanía con el eclipse este lunes, donde a pesar de la lluvia, igual se formaron aglomeraciones?

Es bien preocupante. Nosotros esperamos que ojalá en La Araucanía, que ha sido muy golpeada en los últimos meses por la pandemia, esto no signifique un aumento significativo de los casos. De ser así, lamentablemente, además de todas las estrategias que hay que montar vemos muy necesario tener que introducir medidas de forma precoz, antes que la cantidad de casos siga aumentando y saturando una región que tiene una limitación de camas críticas, y además porque los equipos de salud no han tenido mucho descanso. A diferencia de lo que ha pasado en el Gran Santiago, donde hubo una baja significativa de casos, del Bío Bío hacia el sur llevamos un par de meses con aumentos importantes y con unidades críticas bien al límite.

– ¿Qué paso con la Mesa Social COVID 19? ¿Siguen sesionando?

Sigue funcionando, hoy no ha sesionado, tuvo que suspenderse porque el ministro del Interior debía asistir al Parlamento. Pero claro, nosotros seguimos participando de esta instancia, presentamos por escrito nuestras propuestas, dudas, sugerencias y también nuestros reparos a las políticas que está instalando el gobierno. Es una instancia de diálogo, sin duda, y esperamos que se siga fortaleciendo y sea una instancia de participación cada día más formal, que nos permita dialogar con la autoridad y colaborar con la mirada que tiene el Colmed y sus expertos en esta pandemia.

– ¿A qué te refieres con «cada día más formal»?

Es que, por ejemplo, hay instancias que no pasan por la Mesa Social, nosotros no tomamos decisiones en cuanto a confinamientos, a cuarentenas, a cambios de protocolo. Muchas veces se nos informa, pero quizá no con el grado de participación que nosotros esperaríamos. En esa línea, yo esperaría que esto se fuera consolidando en el tiempo, sobre todo de cara a esta segunda ola, y también no repetir los errores del pasado en donde no existió transparencia con la información. Ahora hemos estado solicitando los datos de viajeros, entendiendo que el gobierno tomó la decisión de abrir la frontera a los turistas a contrapelo del Colegio Médico y del Consejo Asesor, y para poder dar seguimiento, y saber si esta es una buena o mala evaluación, necesitamos esos datos, y más allá de lo que han publicado los medios de comunicación nosotros no hemos tenido a la vista los datos como estos.

– Pero entonces, si el gobierno toma las decisiones sin consultarles, ¿esta ha sido una mesa muy poco eficaz o no?

Es que hay veces donde las cosas se han corregido con bastante velocidad, y también nos ha permitido plantear voces de alerta, pero sin duda queda todavía espacio para una mejora, en nuestro juicio, significativa. Y eso tiene que ver con que podamos conversar de las definiciones que va tomando el gobierno, antes de que estas sean materializadas. Muchas veces se nos informa, y nosotros las valoramos o las criticamos más que incidir en su elaboración.

– ¿Qué llamado le harías al Ejecutivo de cara a las fiestas de fin de año?

Creo que el mensaje tiene que ser muy claro y explícito, nosotros como Colmed hemos invitado a todo el país a comprender y a aceptar que no van a ser unas fiestas habituales, ojalá la podamos celebrar dentro de nuestra familia nuclear, intentar evitar todas las conductas de riesgo, sobre todo las aglomeraciones. También reunirnos con grupos muy grandes, especialmente cuando hay personas de riesgo, porque podemos ser portadores asintomáticos y producir un brote dentro de nuestra familia. Particularmente a la gente más joven, que quizá tiene muchas ganas de reunirse este fin de año, le hago un llamado a la prudencia, a cuidar a nuestros adultos mayores, a nuestros enfermos crónicos, para que las próximas fiestas, del próximo año, podamos encontrarnos con ellas nuevamente y no tengamos que lamentar fallecimientos ni hospitalizaciones graves.

La mujer

– En mayo de este año recibiste amenazas de muerte y de violación a tu correo electrónico. ¿Sientes que por el hecho de ser mujer has recibido más ataques que otros?

Bueno vivimos en un país machista sin duda, donde los liderazgos femeninos tienen agresiones y otro tipo de agresiones como de las que yo también he sido víctima. Creo que sin duda estas en particular deberían ser un buen precedente para que ojalá existiera una legislación mucho más robusta, y no dejara en absoluta impunidad a las personas que creen que -ya sea por las redes sociales o de forma directa- pueden producir ese tipo de agresiones o amenazas.

– ¿Ha sido duro en lo personal el tomar tanto protagonismo mediático?

Tengo un equipo bien consolidado que me acompaña en este trabajo, me toca ser la cara visible, sin duda tiene sus costos, pero creo que estoy bien tranquila con el apoyo de mi familia, de mi equipo dentro del Colmed. Logramos recientemente sortear una elección, y en realidad lo hacemos con mucha alegría y mucho entusiasmo de incidir en el manejo de la pandemia, en las próximas políticas públicas que requiere el país y eso nos llena de energía para lo que viene más adelante.

– Actualmente tienes 5 a 6 meses de embarazo. ¿Qué sensaciones te genera el Chile en el que va a nacer tu bebé más allá de la pandemia?

Yo tengo muchas esperanzas en que estos procesos de transformación, más allá de que son bien turbulentos, sean una oportunidad para nuestro país, para crear un país mucho más justo, inclusivo, diverso, que respete entre las distintas posturas políticas, ideológicas, religiosas. Estoy esperanzada en que mi hija va a nacer en un país distinto, y espero también como médica incidir, particularmente en que el sistema sanitario, sea también un espacio de mucha mayor calidad y dignidad. Me llena de energía, de fuerza, no solamente por mi hija sino que también por los miles de hijos e hijas que vienen para las próximas generaciones. Ojalá que lo podamos hacer en un clima cada vez más fraterno y de diálogo, porque sin duda ha estado un tanto turbulento para todos y todas.

– Y en el sentido de la pandemia, ¿te preocupa?

Efectivamente hay algún riesgo, de parto prematuro, cosas relacionadas con el COVID, pero creo que tomando todas las medidas adecuadas puedo protegerme debidamente de contagiarme -como también le hemos explicado a toda la ciudadanía- y sin duda es algo que evito continuamente.

– En septiembre de este año descartabas postular a la Presidencia argumentando «falta de experiencia». ¿Eso significa que cuando tengas esa experiencia tomarás ese camino?

Hoy día tengo una agenda que es sumamente sanitaria, recientemente ganamos el Colegio Médico, acá tenemos tres años de trabajo y construcción intentando representar a los médicos y médicas del país, esperamos seguir en la agenda sanitaria, llevar el derecho de los ciudadanos a una nueva Constitución, pero en el breve plazo no tengo más expectativas de futuras candidaturas o cargos, pero sin duda tendré que ir evaluando cuando el tiempo pase y según mis proyectos personales y familiares como también con el gran equipo que me acompaña dentro del Colmed.

– Entonces no le cierras completamente la puerta.

Más que nada no le cierro la puerta a la posibilidad porque creo que esto es casi como la Ley de Murphy, si uno dice que no luego terminan ocurriendo ese tipo de cosas y uno tiene que terminar comiéndose sus palabras, así que soy bien cautelosa en ese sentido para no cometer los errores que he aprendido de mis predecesores. A veces los momentos van variando en el tiempo, pero creo que hoy día no es el espacio donde más pueda aportar en el país.

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