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Opinión

¿Dónde está el apoyo a la participación política de las mujeres?

Por: Rosa Moreno Moore | Publicado: 24.08.2020
¿Dónde está el apoyo a la participación política de las mujeres? Marcha 8M en Santiago | FOTO: JOSÉ FRANCISCO ZÚÑIGA/AGENCIAUNO
La gran mayoría somos mujeres y, si este partido es distinto, es justamente porque somos mujeres que irrumpimos en la política con una cultura distinta. Casi todas nosotras, no participaríamos en otros partidos políticos que, aunque tengan buenas intenciones, siguen teniendo una cultura machista muy arraigada y se siguen dando las mismas prácticas nefastas que los han alejado de la población chilena. Por eso formamos el Partido Alternativa Feminista.

 Viendo la oportunidad que se abre con el proceso constituyente de influir en lo que será nuestro nuevo pacto social, un grupo grande de mujeres nos juntamos para crear un partido político y hacer oír nuestra voz feminista en la nueva Constitución. 113 mujeres fundamos el Partido Alternativa Feminista. Concordamos, entre todas, los principios que queremos presentar en la Constitución y decidimos que nuestro partido sería distinto a los partidos tradicionales donde la cultura machista y patriarcal impera.

Desde el 13 de febrero, hemos sido reconocidas por el Servel como partido en formación y se nos ha dado 7 meses para reunir las firmas que necesitamos para constituirnos legalmente. Sin embargo, 6 de esos 7 meses habremos vivido en Estado de Excepción, con limitaciones a la libertad de reunión, de desplazamientos y con toque de queda. La mayoría vivimos en comunas que han estado durante meses en cuarentena, sin poder salir ni hacer reuniones políticas para darnos a conocer.

Aun así, ya somos más de mil y en estos 6 meses hemos logrado organizarnos de una manera totalmente distinta a los demás partidos políticos.

Las decisiones las tomamos todas en conjunto, en asambleas, donde cada una tiene derecho a voz y voto. Somos horizontales, no hay nadie que esté por sobre las demás, la información fluye, no “baja” a las afiliadas. Somos inclusivas, donde todas y todes puedan participar, no importando su origen, edad, condición social, orientación de género o sexual, identidades y nacionalidades diversas. Nos cuidamos de todo tipo de violencias y, por sobre todo, nos cuidamos entre todas. Hemos aprendido muchas a callar para dejar que otras, que han sido siempre subestimadas, participen activamente. Hemos logrado que muchas y muches de nosotres, que nunca habían participado en política antes, se animen a presentar sus proposiciones y discutamos todes de igual a igual.

La gran mayoría, un 90%, somos mujeres y, si este partido es distinto, es justamente porque somos mujeres que irrumpimos en la política con una cultura distinta. Casi todas nosotras, no participaríamos en otros partidos políticos que, aunque tengan buenas intenciones, siguen teniendo una cultura machista muy arraigada y se siguen dando las mismas prácticas nefastas que los han alejado de la población chilena. Por eso formamos el Partido Alternativa Feminista.

Pero el Estado nos quiere acallar.

A pesar de las condiciones adversas que hemos vivido en estos meses que impiden una actividad política normal, el Servel nos ha negado la posibilidad que compañeras se inscriban sin la necesidad de ir a una notaría o tener la clave única. Sin embargo, se lo permitieron a los partidos tradicionales cuando tuvieron que reficharse. Nos han negado la posibilidad de ampliar el plazo de 7 meses para reunir las firmas necesarias, pero les dieron un año a los partidos tradicionales.

El Servel firmó en 2018 un Convenio para Impulsar y Fortalecer la Participación de Mujeres en Política junto al Ministerio de la Mujer y de la Equidad y el PNUD. Adhirieron también 18 de los 20 partidos actuales. El propio Patricio Santamaría, presidente del directorio del Servel, en un documento llamado “Participación de mujeres en política” del mismo año 2018, ha reafirmado su compromiso con ser el garante del aporte a la implementación de políticas públicas que mejoren la calidad de la participación de las mujeres. Aún más, él dice: “Aún existe un espacio de mejora en las condiciones y estímulos a la participación de la mujer. También es cierto, y así lo demuestra la experiencia comparada, que desde los órganos fiscalizadores electorales tiene que haber un rol proactivo, que disponga medidas para el óptimo funcionamiento de las políticas públicas en la materia”.

¿Dónde está el real apoyo del Servel, de los partidos políticos, de las instituciones de este país, para fomentar la participación de las mujeres en la política?

No estamos pidiendo condiciones diferentes a las que tuvieron los partidos políticos tradicionales cuando tuvieron que refichar a sus militantes en circunstancias de vida normal. Estamos simplemente diciendo que hay que considerar las condiciones de la pandemia para que las mujeres podamos participar y llevar candidaturas a la constituyente. ¿Son sólo lindas palabras los convenios que firman o van a llevar, de una vez por todas a la práctica, los principios que dicen defender?

Rosa Moreno Moore